Lavajato

El caso de coimas de Techint en Brasil ya golpea sus contratos en México

La multinacional construye el gasoducto Los Ramones, una de las obras energéticas más ambiciosas en el país.

Las denuncias de corrupción que desataron una crisis en Brasil no sólo salpican al gobierno de Dilma Rousseff, sino que pueden afectar negocios en numerosos países. Es que muchas de las empresas que están señaladas por haber pagado sobornos para obtener cuantiosos contratos con la petrolera Petrobras, también participan en distintas naciones de la región.

México no es la excepción. De las 23 empresas a las que se les prohibió firmar nuevos convenios con la petroleras brasileras -hasta que se aclaren las denuncias en su contra-, seis participan o han participado en gran proyectos en territorio mexicano, según reveló el diario El Financiero en su edición de este jueves..

Pero el caso más resonante es el de las obras del gasoducto Los Ramones, acaso el proyecto más ambiciosos en materia de gas natural que emprendió el gobierno mexicano. La iniciativa contará con una inversión total, en todas sus fases, de 2 mil 500 millones de dólares. Y parte de los contratos están en manos en las multinacionales Techint y Odebrecht, implicadas en los escándalos en Brasil.

Los primeros días del pasado mes de diciembre, Peña Nieto inauguró las operaciones de la primera fase del gasoducto, que va desde la frontera con los Estados Unidos en Tamaulipas, hasta Los Ramones, en el estado de Nuevo León -un recorrido de 116 kilómetros-.

Casualmente, es en la fase II de la obra -que recorrerá 738 kilómetros, desde Los Ramones hacia los estados de Guanajuato, Querétaro y San Luis Potosí- en donde ingresan Techint y Odebrecht, que ganaron la licitación conformando un consorcio junto a la mexicana Arendal.

En rigor, la segunda fase se dividió en dos partes: "Ramones Norte" y "Ramones Sur". Según se explicó, se lo segmentó para cumplir con los tiempos de entrega y minimizar los riesgos en la ejecución del proyecto. El consorcio OAT (Odebrecht-Arendal-Techint) consiguió en julio del año pasado el segmento más jugoso: Los Ramones Norte, que tendrá una inversión de 1.052 millones de dólares por 441 kilómetros del ducto.

"Pemex Gas y Petroquímica Básica (PGPB), a través de su filial Tag Pipelines Norte (Tag Norte), realizó un minucioso análisis de empresas y consorcios que permitan garantizar experiencia técnica y capacidad para desarrollar en tiempo y forma el proyecto Los Ramones Fase II-Norte", comunicó la petrolera mexicana al anunciar la adjudicación del consorcio OAT.

Pese al minucioso análisis que se realizó de las empresas, en medio de un largo debate sobre la necesidad de transparentar el accionar de los funcionarios públicos y sus vinculaciones con los privados, dos de los tres integrantes son denunciados en otro país de la región.

No es un hecho menor, si se tiene en cuenta que sucede justo en momentos en que el Congreso de la Unión debate un nuevo Sistema Anticorrupción, luego de que el gobierno admita que efectivamente el país atraviesa una crisis de confianza.

Y uno de los sucesos que desató o, al menos, alimentó esta crisis de desconfianza y decrédito, también surgió por un contrato con un privado: la licitación para la construcción del tren rápido México-Querétaro. En esa oportunidad, un consorcio integrado por el Grupo Higa -denunciado por sus vínculos con el gobierno- empañó el proyecto, que después de varios vaivenes fue cancelado definitivamente.

La Política Online se comunicó con las oficinas de Odebrecht en Distrito Federal para conocer el impacto de las denuncias brasileras en sus negocios en México. Desde la firma se explicó que no habría una posición oficial, porque la cultura de la compañía es que cada oficina es una empresa independiente.

Odebrecht tiene presencia en México hace más de 23 años, y uno de sus clientes más constantes ha sido Pemex. Pero también participa en otros sectores, como construcción de plantas tratadoras de agua y de plantas de polietilenos, entre otros negocios.

Desde Techint se aclaró a través de un comunicado que "no existió irregularidad alguna en las contrataciones de los proyectos de los cuales participó y/o ejecuta para Petrobras en Brasil" y se señaló que "respeta integralmente la legislación brasileña en todos sus aspectos".

Desde LPO se consultó sobre el impacto que puedan tener las denuncias en sus contratos mexicano. "Techint está comprometida con el cumplimiento estricto de todas las leyes y regulaciones en vigencia en los países en los que opera y para ello cuenta con los procedimientos adecuados a tal fin, incluyendo un Código de Conducta, políticas de transparencia, sistemas de control, auditorias periódicas y canales para reportar irregularidades, entre otros varios mecanismos", fue la posición de la firma.

Controles del Sistema Anticorrupción

El diputado del PAN, Fernando Rodríguez Doval, explicó que el nuevo Sistema Nacional Anticorrupción podría fortaleces y transparentar las licitaciones de obras en las que participen empresas, para evitar denuncias como las que ocurrieron en Brasil.

"Se fortalecerán los organos internos de control, es decir las auditorias internas de cada dependencia, que se encargan de revisar que todos los contratos que se hayan realizado como debe ser: sin adjudicaciones directas cuando no corresponde, sin nepotismo, ni conflicto de interes", señaló.

El legislador panista agregó que también se está proponiendo que cada funcionario público presente una declaración de interés, para descartar que tome decisiones cuando tenga algún vínculo con alguna empresa que pudiera obtener un contrato u obra.

"Y por último, en caso de denuncias de esta magnitud, con las atribuciones que se le otorga a la Auditoria Superior de la Federación, se podrían revisar esos contratos tanto a nivel local como a nivel federal", concluyó.