El Senado formalizó los nombres de la Bicameral para elegir al Defensor del Pueblo
Un día después que LPO adelantara que La Cámpora decidió tener candidato propio para pelear el cargo de Defensor del Pueblo, el Senado bonaerense abandonó su letargo y en pocas horas resolvió los nombres para integrar la comisión bicameral.
Se trata de siete senadores, tres del Frente para la Victoria, tres del Frente Renovador y uno del radicalismo. Según trascendió, los senadores se reunirán mañana, aunque trascendió que sólo será encuentro informal, toda vez que todavía no existe un consenso interno sobre los candidatos a elegir.
Esos senadores se sumarán a los siete diputados que en mayo del año pasado fueron designados para elegir los candidatos a estar al frente de la Defensoría. Los legisladores de la Cámara Baja son Graciela Rolandi, Luis Fernando Navarro, Cesar Valicenti y la propia Raverta por parte del Frente para la Victoria; Ricardo Jano, del Frente Renovador; Abel Buil, del Frente Amplio Progresista; y Liliana Denot, de la Unión Cívica Radical.
LPO adelantó ayer que La Cámpora decidió pelear por ese organismo promoviendo a la diputada provincial Fernanda Raverta como nueva Defensora del Pueblo, en reemplazo de Carlos Bonicatto cuyo mandato vence en las próximos horas.
La elección del Defensor es un tema que en la Legislatura se venía manteniendo en absoluto hermetismo, pero el adelanto de este portal adelantó los tiempos.
Es que en diciembre se cumplieron cinco años de la elección de Bonicatto. Sin embargo, a través de un resquicio legal se permitió su continuidad hasta el 25 de febrero, fecha en que el ex diputado asumió formalmente.
Algunas versiones indican que se buscaría consensuar una prórroga del mandato hasta fines de 2015, con el objetivo de que sea el próximo gobierno que marque las pautas para la elección del Defensor.
El tema es esquivo tanto en legisladores oficialistas como opositores, pero desde ambos lados intentan promover nombres. En silencio, el sciolismo quiere que Bonicatto tenga un segundo mandato.
La oposición, por su parte, no propala nombres. Lo cierto es que nadie quiere quedarse a fuera de un organismo de control que dispone de un presupuesto de casi 210 millones de pesos.