Mariotto ya piensa en su salida y ubicó a sus directores en planta permanente del Senado

Su misión al frente del Senado bonaerense era eliminar las viejas prácticas de la política legislativa en sintonía con los 'nuevos tiempos'. Cambiar la matriz en un poder supuestamente corrompido para avanzar con prácticas limpias de todo vicio. 

Pero esa encomienda pareció quedar en el olvido. O al menos, la nueva matriz K poco difiere de prácticas que durante tantos años impusieron quienes tuvieron el poder en el Senado.

En las últimas horas, Gabriel Mariotto firmó los expedientes que otorgan a sus directores el preciado beneficio de una planta permanente en el Senado.

Según pudo saber LPO, el vicegobernador apeló a un práctica muchas veces utilizada por peronistas y radicales que ostentaron el poder de la presidencia del Senado. Esto es, hacerlos renunciar al cargo de director (un cargo político), firmar el nombramiento en la categoría más alta de planta permanente, solicitar la reserva de ese cargo y volverlos a designar con el cargo de directores. Traducido: El 10 de diciembre dejarán su cargo de director pero mantendrán su sueldo de planta con un salario que supera los 16.000 pesos.

LPO pudo acceder a algunos detalles pese al hermetismo que encierra el Senado en estos temas. En los últimos días, el vice hizo renunciar a sus directores y a las pocas horas los nombró en planta permanente con categorías que van de la 17 a la 20. Más tarde, los nuevos empleados legislativos solicitaron lo que se denomina 'reserva de cargo' para ocupar otra vez el cargo político de directores. De este modo, cuando esos cargos caigan en diciembre podrán mantener el salario de la planta permanente. Según la estructura de salario actual la categoría 17 establece un sueldo de 16.756 pesos. La 20 comprende una remuneración de 20.082 pesos y sigue creciendo.

Todo se hizo con la anuencia de los sindicatos, principalmente la Asociación del Personal Legislativo (APL) y Unión Personal Civil de la Nación (UPCN).

Según trascendió, dos hojas con las listas provisorias de nombres se mantuvieron en reserva estricta. Para ubicar a sus directores el propio Mariotto tuvo que quitar de la lista de espera a empleados contratados que esperaban ese nombramiento desde hace muchos años. El vice fue intercalando los nombre de sus leales directores con renuncias y nombramientos, una manera poco sutil de ocultar la maniobra. Finalmente habría logrado el preciado cargo para unos 36 militantes

Esto con la anuencia de los sindicatos (UPCN esencialmente, que coloca sus fichas). Mezclados en las dos hojas de nombres con renuncias y nombramientos, hay algunos pocos que eran transitorios de años y los designaron en la planta permanente.

Con todo, la maniobra está lejos de las buenas prácticas que propone el relato de 'la nueva política' y que el propio Mariotto pregona desde su llegada a la Cámara Alta.

Es que en los pasillos del Senado, todavía resuenan algunas frases de aquella recordada entrevista del vice con el conductor Alejandro Fantino. Allí, Mariotto denunció la existencia de "valijas con dinero" en la negociación de leyes importantes. "Muchas de las leyes salían por una alineación importante que no tenía que ver con la discusión política", dijo.

La frase fue un misil para algunos senadores kirchneristas que durante varios años habían acumulado poder en la Cámara. El caso de Cristina Fioramonti (esposa de Carlos Kunkel) y Patricio García (un senador que responde a Julián Domínguez).

"Existía una vieja metodología de lograr los acuerdos. Esto contemplaba irse a una oficina y bajar con todo arreglado. Sin discusión política", decía el vice y agregaba: "este nuevo Senado va a cambiar esa matriz". Esas declaraciones -de mayo de 2012- generaron tal tensión con Fioramonti y García que aún hoy reaparecen los roces.