Comercio

No hubo acuerdo con Brasil y las reuniones seguirán la semana que viene

El Canciller Héctor Timerman se reunió en la Casa Rosada con su par brasileño, Maurio Viera.

El canciller Héctor Timerman afirmó que ofreció al Brasil una reunión de viceministros para tratar todos los diferendos entre ambos países, tras una reunión con su par del vecino país, Mauro Viera, en la Casa Rosada.

El canciller argentino no especificó el día ni el lugar del encuentro de los grupos de trabajo.

Además de Timerman, del cónclave participaron, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y los ministros de Economía, Axel Kicillof, de Planificación, Julio de Vido, y de Industria, Debora Giorgi. "Quedamos en que la República Argentina le ofrece a Brasil que en las próximas semanas haya una reunión a nivel de viceministros para tratar todos los temas económicos de la relación", señaló el funcionario argentino.

Por otro lado, los dos jefes de la diplomacia de Argentina y Brasil definieron que van a mantener encuentros de carácter político cada tres meses.

Según dijeron ambos cancilleres, la reunión que mantuvieron con las principales figuras del gabinete fue de carácter "informativo".

Al igual que en oportunidades anteriores en las que los cancilleres no logran avanzar en la resolución de los problemas, decidieron patear la pelota para adelante y llamar a técnicos para seguir la discusión.

Timerman no obstante, reconoció que ambos países tienen que "afinar" la relación económica, afectada por una fuerte caída del intercambio comercial.

Ante una consulta sobre si el acuerdo que firmó Argentina con China puede afectar la relación con Brasil, Timerman aseguró que "no va en desmedro del Mercosur" y que por el contrario "lo potencia".

Vieira afirmó que Brasil mantiene "una relación estratégica con Argentina pero que ello no excluye a otros países". "La relación con China es abierta e intensa con todos los países de la región", añadió el canciller brasileño.

La jornada de trabajo arrancó a la mañana en el Palacio San Martín donde ambos cancilleres compartieron un almuerzo y luego por la tarde se trasladó a la Casa Rosada.