Mendoza

Metalúrgicos mendocinos enfrentan a Paco Pérez por dejar entrar a China

Con IMPSA como referente, rechazan los acuerdos en temas hidroenergéticos con el gigante asiático.

La Asociaicón de Industriales Metalúrgicos de Mendoza, Asinmet, salió este viernes a pedir que el Gobierno provincial declare la emergencia en el sector, muy afectado desde que hace un año comenzaron los problemas financieros de IMPSA, agravados por los recientes acuerdos con China. 

La nave insignia del grupo de empresas de Enrique Pescarmona, cayó en una grave crisis primero en Brasil y luego en el país, según sus directivos, por no poder cobrar trabajos millonarios realizados en Venezuela. Al mismo tiempo, “el parate en diversos lugares del mundo” también ayudó a que IMPSA debiera incluso solicitar Repro al Gobierno nacional para hacer frente a los sueldos de unas 2.000 personas que emplea en Mendoza.

Desde Asinmet, de cuyos integrantes casi 75% son contratistas de IMPSA, salieron a advertir que si la empresa no tiene trabajos para realizar en el país, serán unos 90 los talleres locales que cerrarán sus puertas. Así lo afirmó el titular del gremio empresarial, Julio Totero, quien además le solicitó el gobernador Paco Pérez “trabajo” para IMPSA.

Por el momento, y tras varias propuestas oficiales, IMPSA espera poder ser parte de la construcción del dique Los Blancos, una obra de 11.000 millones de pesos que ya en la época del romance entre Julio Cobos y Néstor Kirchner se prometió. Según Pérez, “está a la firma” de Julio de Vido para comenzar a construirse.

En ese sentido, Asinmet se mostró contraria a los acuerdos con China en temas hidroenergeticos, justamente el fuerte de IMPSA. Esta postura desató el enojo de Pérez, quien aclaró que los empresarios “están confundidos”, porque “Los Blancos se harán con empresas locales y mano de obra local”.

Con todo, IMPSA continúa esperando algún gran proyecto para hacer frente a la difícil situación que atraviesa. Incluso apuesta a ganar alguna gran licitación nacional que la devuelva a los primeros planos como los que ocupaba hace poco tiempo. Mientras, son 90 los talleres que la están pasando mal ya que son contratistas casi exclusivos de Pescarmona.

Hace pocos días, incluso, los empleados de IMPSA llevaron adelante varios cortes en la entrada a la planta principal de IMPSA en el país, en la zona industrial de Rodríguez Peña, en la comuna mendocina de Godoy Cruz. Reclamaban varios ítems no pagados en los últimos meses. Finalmente, y con ayuda del Gobierno nacional, la empresa se puso al día, al menos por ahora, esperando el tan ansiado “gran proyecto” que la saque de su crítica situación.

Además, la empresa espera que se haga realidad la promesa que hizo el gobernador Pérez el año pasado de que la Provincia le comprará a IMPSA su parte del dique Potrerillos. Se trata del 30%, es decir unos 25 millones de dólares. Sin embargo, no hay noticias de que el anuncio se vaya a concretar en el corto plazo, menos si se tiene en cuenta que el presupuesto 2015 viene complicado y recién se podría estar aprobando en marzo o abril.