Muerte de Nisman

El Gobierno admite que Cristina "no tiene elementos" para sostener que Nisman no se suicidó

Aníbal Fernández admitió que la mandataria irá a la Justicia "cuando tenga pruebas". La acusan de interferir en la investigación.

El Gobierno nacional tuvo que admitir que Cristina Kirchner "no tiene pruebas" para sostener que el fiscal Alberto Nisman no se suicidó y que su muerte "fue una operación contra el Gobierno" por parte de sectores que "lo usaron vivo y después lo necesitaban muerto".

El secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, convertido ya en el principal vocero del Gobierno, aclaró esta mañana que la Presidenta realizará la denuncia correspondiente ante la Justicia cuando "tenga un elemento a la mano".

"¿Dónde cree que va a ir la Presidenta cuando tenga un elemento a la mano como para exhibírselo? Va a denunciar a todos" cuando "tenga los elementos, sea quién sea cuando tenga un elemento a la mano", contestó el funcionario cuando se le preguntó si la mandataria recurriría a la Justicia para acusar a quienes podrían haber participado de la muerte de Nisman.

Respecto de la carta de Cristina, el secretario evaluó que "la presentación de la carta de la Presidenta es muy profunda. Es duro, porque está diciendo" que "se opera contra los gobiernos". "No soy exégeta de la Presidenta, no voy a ponerme a hacer interpretaciones entre líneas", pero "las definiciones son concretas: no tiene pruebas pero no tiene dudas" sobre la causa de la muerte de Nisman: "Es una definición contundente respecto de lo sucedido", completó. 

Fernández agregó que "la Presidenta está diciendo algo que es muy fuerte y es imperioso que los argentinos tomen nota. Hacía años que no había un gesto de esta característica y está ligado a lo sucedido en la Secretaría de Inteligencia en el desplazamiento de determinadas personas que trabajaron muchos años en ese lugar".

Ayer, Cristina dio un inesperado giro y salió a agitar la hipótesis de un homicidio, dejando en ridículos a los funcionarios que habían descartado cualquier otra teoría que la del suicidio. Incluso la propia Presidenta había preguntado en su primer carta "qué fue lo que llevo a una persona a tomar la terrible decisión de quitarse la vida".

Tanto las declaraciones de la mandataria como la de los funcionarios apuntan a agentes de inteligencia desplazados el mes pasado de la ex Side. En particular, mencionan al ex jefe de Operaciones de ese organismo, Antonio "Jaime" Stiusso, que trabajó con Nisman en el caso Amia. 

Cristina y Aníbal sugirieron que Stiusso engañó al fiscal con pistas falsas para que presente la denuncia por encubrimiento. Hoy, Fernández aseguró que "Nisman no pudo haber escrito esa burrada". "Alrededor de él había alguien con intereses de otras características", agregó.

El texto de Cristina generó críticas de la oposición y miembros de la oposición y el Poder Judicial, que cuestionan que la mandataria lance hipótesis al aire sin ninguna prueba aparente que las respalda. En todo caso, si tuviese alguna prueba lo lógico sería que la aporte a la investigación.

"Señora Presidenta: deje de actuar como un adolescente que usa el Facebook para condicionar a la Justicia con sus opiniones. Ella es la que más posibilidades tiene de colaborar y lo que está haciendo es dar su posición, opinando, y eso es condicionador", afirmó el diputado Francisco De Narváez.

El diputado José Cano declaró, por su parte, que Cristina "actúa con una irresponsabilidad extrema, impropia de la investidura que le toca ejercer". "Sin esperar la determinación de la investigación judicial que se lleva adelante, dice ahora que el fiscal Alberto Nisman fue asesinado en una operación política para perjudicarla. Debe ser citada en forma urgente para que aporte las pruebas de tan temeraria definición", señaló.

En tanto, el fiscal ante la Cámara del Crimen Ricardo Sáenz acusó a la jefa de Estado de "interferir" en la investigación por la muerte de Nisman. Según Sáenz, la carta "no deja la tranquilidad de ánimo ni la independencia que una fiscal y una jueza" deben tener para cumplir con sus respectivas tareas.  

El vicepresidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional agregó que "la independencia de Poderes, en un Estado republicano, implica que cada Poder ejerce libremente las funciones que la Constitución le otorga". 

"Si los políticos empiezan a decir para mí es tal cosa, esto interfiere. La tranquilidad de espíritu que necesita un fiscal y un juez para intervenir en un caso de esta magnitud es mucha", indicó Sáenz en radio Continental. "Es un problema para la investigación porque no es lo mismo para la fiscal o para la jueza leer qué opina la vecina sobre el caso que leer qué opina la presidenta de la Nación", concluyó.