Elecciones 2015

Preocupación en el sciolismo porque sólo retendrían un 20% de los votos de Randazzo

Sus encuestas lo dan ganador en la interna, pero sin captar el caudal del FPV. Echarían a Camaño.

“No seamos masoquistas”, le pidió el gobernador Daniel Scioli a sus pares del Frente para la Victoria tras las duras críticas que recibió por animar un acto de Clarín en Mar del Plata.

Pragmático, su reacción no se debió al tono de los ataques sino a las encuestas que le acercaron sus colaboradores: según pudo saber LPO, todas coinciden en que vencería a Florencio Randazzo en las primarias, pero sólo captaría un 20% de sus votantes en la general.

El porcentaje puede variar levemente según el sondeo, pero en todos los casos queda claro que el gobernador debería captar muchos votos de otros frentes para ser competitivo en octubre si, como parece, su relación con Cristina no encuentra retorno y su sueño se de ser candidato único se desvanece.

Las proyecciones alteraron a los equipos sciolistas porque para todos coinciden en que, aunque existan encuestas con Scioli arriba en una general, es riesgoso confiarse en que Massa o Macri derrapen tras las primarias, si la foto del lunes los deja con más votos que los candidatos del FPV.

Randazzo se adjudicó ayer ser el elegido de la Casa Rosada aunque, fiel a su estilo, la presidenta mantiene la incógnita y habla más seguido con Julián Domínguez. Claro que a diferencia del ministro, el diputado repite que aceptaría gustoso ser candidato a gobernador.

Scioli siempre supo que compartía la mayor parte de su potencial electoral con Cristina y por eso jamás evaluó una ruptura. Bajo el slogan de “continuidad con cambio” busca acaparar el voto del Frente Para Victoria (que sigue siendo el sello más taquillero) y sumarle algo de capital propio.

Y evitar como sea un escenario de kirchnerismo contra anti-kirchnerismo, un arma de doble filo porque si bien Cristina no baja del 30% de imagen positiva, más de la mitad del país sigue interesado en un cambio.

Con estas armas, Scioli llegó a soñar en consagrarse en la primera vuelta al aventajar por 10 a su escolta, tesis que tomó Elisa Carrió para exigir una interna de toda la oposición.

Pero con Cristina empecinada en tomarlo como un opositor más el escenario se reacomodó y el gobernador quedó obligado a barajar y dar de nuevo, sobre todo para cerrar mejores acuerdos territoriales.

En su equipo ya hablan de cambios inminentes. El primero sería desplazar a Eduardo Camaño como uno de los jefes de campaña, cargo que ejerce desde hace un año en las oficinas del Banco Provincia en Capital Federal.

El ex ministro de Gobierno no cerró ningún aliado, ni siquiera evitó las torpezas de José “Pepe” Scioli en las provincias y los senadores que lo visitan a diario, como la santafesina Roxana Latorre, responden primero a Miguel Pichetto, sciolista de la primera hora.

“Scioli ya ni va al Banco Provincia, quiere manejar la campaña de otra manera”, admitieron a LPO fuentes de la Gobernación. Un dato: Camaño no viajó a Mar del Plata a celebrar el cumpleaños 58 del gobernador.

La falta de acuerdos en las provincias comenzará a hacerse sentir cuando la interna suba de tono, Cristina vuelque su estructura hacia Randazzo, la mayoría de los gobernadores desdoblen los comicios y la compulsa se mida por imagen y estructura. Es la pelea que ya comenzó y que Scioli estudia en detalle.