The Economist pronostica un 2015 de "inflación galopante" y "crisis de pagos" para Argentina

El periódico británico advierte sobre el riesgo de "revueltas populares" antes de las elecciones. La respuesta del Gobierno.

El periódico británico The Economist realizó un demoledor pronóstico para el último año del gobierno de Cristina Kirchner, advirtiendo sobre el riesgo de "inflación galopante", "crisis de pagos" y "revueltas populares".

En el informe "The World in 2015", donde realiza sus tradicionales previsiones políticas y económicas para el año venidero, The Economist señala que "el gobierno peronista de Cristina Kirchner está en riesgo de una inflación galopante, crisis de la balanza de pagos y revuelta popular antes de que llegue a las elecciones de octubre".

El prestigioso medio agrega que "las medidas necesarias para evitar esto serán doloras para la población y un anatema para los ideólogos del Gobierno". Para la inflación será del 26% en 2015, mientras que el PBI crecerá 1,9%.

Asimismo, el análisis también hace hincapié en las elecciones presidenciales de octubre y señala que "es probable" que el sucesor de Cristina Kirchner "sea otro peronista". Al respecto, agrega que el próximo presidente tendrá que trabajar para "estabilizar la economía" y para un "acceso renovado a los mercados internacionales de capital, cerrados desde el default de 2001".

The Economist completa su informe estimando que los argentinos elegirán un gobierno "más pragmático y moderado" para poner fin a los años de las medidas "populares y nacionalistas". Estima que la elección se dirimirá entre Sergio Massa, Daniel Scioli y Mauricio Macri, y que quien sea el vencedor enfrentará el desafío de la pelea con los fondos buitres, además de modificar las políticas de subsidios y controles a las importaciones.

La respuesta oficial

La réplica oficial no tardó en llegar. Jorge Capitanich descalificó el pronóstico de The Economist y dijo que ese medio es "una usina conservadora pagada por el sistema financiero internacional" para "denostar a la Argentina".

En ese sentido, el jefe de Gabineteaseguró que "nos ponemos contentos y orgullosos" por la crítica del periódico británico, "porque eso quiere decir que estamos en la buena senda".

Finalmente, Capitanich dijo que el país tendrá para el próximo año "una menor demanda de dólares" producto de una "proyección de deuda decreciente", además "del precio y la sustitución de importaciones de energía", por lo que Argentina "tiene solidez desde el punto de vista macroeconómico".