La "Corpo" Masticar

Exclusivo: El “chefgate” que amenaza a Macri

La oscura cofradía Acelga detrás de la feria Masticar y la escandalosa cena del chef de Tinelli en la Costa Azul de Francia.

La Política Online desenredó la sofisticada rosca de los chefs PRO, una oscura cofradía de cocineros famosos que reciben subsidios del gobierno de Mauricio Macri para viajar, hacer negocios y comer.

Aquellos prestigiosos cocineros enfadados con sus colegas que no los dejan entrar en el circuito de subsidios del gobierno porteño, definen a la cofradía como la “Corpo Masticar”, en alusión a la “Feria Masticar”, que ya se realizó tres veces en el predio “El Dorrego” de Zapiola 50.

En esas ferias, auspiciadas por el gobierno porteño para “fidelizar los votos gastronómicos”, participaron cocineros de excelencia como Germán Martitegui -dueño del exclusivo Tegui y conductor del reality Masterchef- y famosos como Narda Lepes, que definió al evento como “Una fiesta que es a la vez cool y popular”.

En ese sentido, la última Masticar, realizada el mes pasado, habría dejado una ganancia de 20 millones de pesos entre venta de entradas, platos y bebida. Pero el beneficiado no es el gobierno porteño sino A.C.E.L.G.A, la asociación de cocineros y empresarios argentinos que armaron los chefs de la Corpo.

Polémica mediterránea  

Uno de los cabecillas de la Corpo Masticar es Mauro Colagreco, un excelente chef que desde hace tres años es el asesor del Alvear Palace Hotel y de Unik, un exclusivo restaurante de “Palermo Rúcula”, como define Horacio Verbitsky a esa zona en la que es difícil conseguir una simple ensalada de lechuga y tomate.

Miembro de Acelga, Colagreco es el chef preferido de Marcelo Tinelli y estará a cargo del restaurant que el conductor de Showmatch abrirá en Santa María de los Andes, la finca de Lorenzo, su propia bodega mendocina.

La bodega, que quedó en medio de denuncias de riego clandestino, tiene participación accionaria del coreano Young Woo, de Tinelli y de Daniel Awada, el cuñado de Macri.

Colagreco, que se cruzó con Macri en la inauguración de la bodega, realizada hace dos semanas en la exclusiva Mansión Four Seasons, recibió un polémico subsidio para cocinar en su propio restaurante Mirazur, que funciona en la paradisíaca Costa Azul francesa y le permitió convertirse en el único cocinero argentino que obtuvo las inalcanzables estrellas Michelin.

A través de la disposición nº 99 del Ente de Turismo, a cargo de Fernando de Andreis -ahijado de Macri-, el gobierno porteño le pagó 121.846 pesos con 45 centavos por contratación directa a la firma MC Conseils S.A.R.L, para que organice el evento "Noche Buenos Aires-Mentón".

Mentón es la localidad de la costa francesa donde está ubicado el restaurant Mirazur de Colagreco. El evento fue una “cena porteña”, realizada el pasado 1º de septiembre para promocionar la cocina argentina a “periodistas y referentes europeos que trabajan en el rubro”.

“El objeto específico de la mentada acción ha sido el de promocionar la Ciudad de Buenos Aires como destino gastronómico, y se alinea con algunas de las finalidades institucionales de ésta repartición: entre ellas, posicionar a la ciudad de Buenos Aires como una de las grandes capitales gastronómicas de Sudamérica y aumentar la demanda turística internacional un 2%”, reza la disposición publicada ayer en el Boletín Oficial.

Es decir que la Ciudad pagó 120 mil pesos para financiarle a Colagreco una cena en su propio restaurant en Francia, con una exclusiva y selecta concurrencia que de una manera misteriosa hará aumentar un 2% la demanda turística de Buenos Aires. Eso sí, los periodistas comieron gratis.

Pero ese no es el único subsidio gastronómico-internacional que efectuó el gobierno de Macri a la cofradía Acelga: el gobierno porteño también es auspiciante de “Cocinando a 10 manos”, un evento creado el año pasado por Colagreco, que cocina con otros cuatro colegas en su restaurant.

El pasado 3 de octubre, a Colagreco lo acompañaron Martitegui, Narda y los prestigiosos Fernando Trocca y Darío Gualtieri: todos de la Corpo Masticar.

De esta manera, el gobierno porteño subsidió una cena en Francia en la que el cubierto se cobró 185 euros (2079 pesos al cambio oficial) y en la que el organizador también obtuvo otros sponsors de privados que bien podrían haber costeado los pasajes y el alojamiento de los chefs que “promocionan” a nuestro país.

Desde el despacho de un legislador de la oposición aseguraron a LPO que presentarán un pedido de informes.