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La justicia uruguaya citó a Doris Capurro por una pelea inmobiliaria con Valeria Mazza

A la amiga de Cristina y vice de YPF la citaron por querer trabar un emprendimiento de la modelo en Manantiales.

Doris Capurro, la consultora en comunicación cuyo mayor pergamino es ser amiga de Cristina Kirchner, quedó envuelta en un escándalo de lobby empresarial por trabar un emprendimiento de la modelo Valeria Mazza en Punta del Este.

Mazza y su marido Alejandro Gravier impulsan la construcción de un exclusivo complejo inmobiliario llamado “Selenza Manantiales”, y aseguran que cuentan con el aval Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) de Uruguay.

Sin embargo, el proyecto se trabó por la resistencia de los vecinos de Manantiales, que reclaman que la construcción del complejo podría afectar el suelo, en especial por la instalación de un sistema de “talasoterapia”, una terapia con sales de mar que es el principal atractivo del spa que ideó el matrimonio Gravier-Mazza a través de la empresa “Vamagra”.

Quienes encabezan la protesta son los vecinos de Terrazas del Cultural, un complejo desarrollado por Franco Macri, que se quejan de que les van a tapar el sol con la construcción del nuevo predio.

Pero Mazza y Gravier creen que hay gato encerrado en esa protesta y apuntan contra Capurro por hacer lobby contra el emprendimiento. 

A la amiga de Cristina la acusan de encabezar la oposición de los vecinos de Manantiales en contra de Selenza y para eso sacaron a la luz que Doris es dueña de una propiedad en esa localidad.

En este contexto, la sociedad uruguaya Odelpark SA que lleva adelante el de Mazza y Gravier junto al empresario español Félix Abanades (principal del grupo Rayet de España), pidió una audiencia de conciliación con Capurro, a quien notificaron en su casa de Manantiales, inmueble que se encuentra a nombre de la sociedad Desarrollos Urbanos Ltda pero que es de su propiedad. 

La audiencia se llevó a cabo el jueves pasado en el juzgado de paz de Maldonado.

Capurro saltó de la gerencia de asuntos institucionales de YPF al directorio y luego a la vicepresidencia de la petrolera que estatizaron los Kirchner. 

Su amistad con la presidenta le valió convertirse en la número dos de la empresa que preside Miguel Galuccio, pese a que no tiene conocimiento alguno sobre materia energética, sino que se dedica a la comunicación.

Recientemente, tal como adelantó LPO, Capurro y su consultora fueron eyectadas del gobierno del entrerriano Sergio Urribarri, lo que llegó a motivar rumores de una ruptura entre el “Pato” y Cristina.