Se puede enderezar la economía sin necesidad de hacer un ajuste

Se pueden resolver nuestros problemas en un marco de crecimiento, potenciando inversiones y empleo.

El debate económico de maneracreciente se focaliza en las visiones y propuestas que los distintos espaciospolíticos plantean frente al escenario electoral. Así, uno de los primerostemas que surge en el debate público yen las evaluaciones privadas es la necesidad o no de un “ajuste”.

Un detalle no menor sobre estepunto, es que en reiteradas ocasiones se intenta asociar una pretendida sinceridaden los planteos al reconocimiento de la necesidad de un “ajuste”.

Es convenviente recordar que hanexistido etapas de nuestro país dónde existían restricciones importantes queobligaron a diseñar políticas en marcos de limitaciones objetivas. Sin embargo,el futuro de nuestra economía no debiera proyectarse con una lógica de ajuste opartiendo de supuestos de limitaciones que impidan resolver nuestros problemasen un marco de crecimiento. Hoy, Argentina tiene potencialidades concretas.

Nuestro país tiene una enormecapacidad de desarrollo de su sector agropecuario, diversificación y capacidaden su sector industrial, recursos energéticos significativos, una industria dela construcción que puede liderar la recuperación, y actividades de turismo,comunicaciones, comercio que tienen todas las posibilidades de aportar a unfuerte crecimiento.

Asimismo, más allá de losdesequilibrios externos y fiscales, nuestro país tiene un perfil de vencimientosde deuda para los próximos años que le permite mostrar capacidad de repago desus compromisos e incluso acceder a endeudamiento para obras estratégicos deinfraestructura.

El contexto internacionaltambién es un factor importante. Los precios internacionales de nuestrasprincipales exportaciones siguen siendo elevados en términos históricos, existeliquidez internacional que favorece la llegada de inversiones externas directasy además el acceso a financiamiento para objetivos trascendentales.

Es claro también que tenemoscapacidades humanas, trabajadores y empresarios, conocimiento técnico ycientífico.

Sin embargo, muchos de losproblemas que enfrentamos hoy se originan en erróneas decisiones que fueronacumulando inconsistencias y que actualmente las vemos con mayor nitidez: haydecisiones de inversión y actividades que están limitadas por la falta decertidumbre o consistencia de las políticas adoptadas.

De esto se desprende que laspotencialidades de nuestro país se encuentran frenadas innecesariamente. Así,toda nuestra capacidad se puede poner en marcha si se adoptan políticasadecuadas.

Ese es el desafío, combinarpolíticas macroeconómicas, medidas de incentivo sectorial, estímulosfinancieros, impositivos eficaces, y criterios en las negociacionesinternacionales que permitan ganar mercados, diseñar un rol del Estado queacompañe y equilibre las relaciones del sector privado.

El desafío central es generarpolíticas que plasmen un elevado crecimiento, adoptar iniciativas estratégicasque contemplen los recursos para que ese crecimiento sea sustentable (ejemplo,el abastecimiento energético), y ordenar los desequilibrios concretos queexisten en el marco de la expansión de la economía.

El objetivo debe ser mejorarlos resultados fiscales, lograr un mercado cambiario único y libre, disminuirel peso de los subsidios empresarios o sectores con poder adquisitivo paratrasladarlos a los sectores más necesitados, disminuir los déficits comercialesestructurales que presentan un conjunto de sectores de la economía.

El ordenamiento de losproblemas que la Argentina tiene, pueden y deben realizarse escapando acualquier lógica del ajuste sino como parte del crecimiento económico, demanera que se ordenamiento potencie las inversiones y el empleo, y de maneraque la realidad de la sociedad en su conjunto sea una mejora del poderadquisitivo.