Córdoba

De la Sota denunció que el kirchnerismo busca desestabilizarlo con violencia gremial

La capital provincial vivió varios hechos de violencia gremial, que según De la Sota fueron promovidos por "kirchneristas".

El gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, recordó que en las últimas semanas hubo varios episodios violentos en la ciudad de Córdoba, como en la aprobación de la ley ambiental o durante el tratamiento de un convenio entre la empresa Monsanto y la Facultad de Ciencias Agropecuarias.

Para el gobernador, se trata de acciones que buscan provocar el caos en la provincia, justo ahora que está lanzado a la carrera presidencial.

“Son pequeños grupos”, los minimizó De la Sota, quien destacó que en la provincia “todos los gremios estatales han firmado” el acuerdo.

"En Córdoba se dialoga todo. Yo estoy siempre abierto al diálogo y recibo a todos los sectores que me plantean su agenda y buscamos soluciones", insistió.

De la Sota trata de diferenciarse del kirchnerismo con una serie de reuniones con empresarios y sindicalistas.

Los incidentes del miércoles al mediodía ocurrieron cuando manifestantes de ATE (Asociación Trabajadores del Estado) que trabajan en el Hospital Misericordia marcharon a la sede del SEP (Sindicato de Empleados Públicos) para criticar a este gremio por haber aceptado el bono navideño de 1.500 pesos.

SEP es el gremio mayoritario en el sector estatal y su principal referente, José Pihen, es además legislador provincial por el bloque Unión por Córdoba (delasotismo).

Para ATE, el doble juego de Pihen como legislador oficialista y sindicalista estatal termina por no defender a los empleados estatales.

La batahola en la sede del SEP por el ataque de los manifestantes de ATE arrojaron varios heridos, entre ellos policías que trataron de contener a los violentos.

El secretario general del SEP, Pihen, dijo que “si vienen a atacarnos, nosotros somos los agredidos, de ninguna manera somos agresores”.

Curiosamente, la secretaria general de ATE, María Teresa Romero, aclaró que rechaza los hechos de violencia ocurridos en el centro cordobés, y dio a entender que hubo grupos que se escaparon del control gremial: “algunos trabajadores se ven desbordados ante la realidad: el sueldo no llega a fin de mes”.

“Esto no justifica ningún acto violento pero enmarca una situación donde el gobernador hecha permanentemente nafta al fuego, menospreciando las medidas de fuerza que se llevan a cabo en los hospitales o sindicando a ATE como punta de lanza de algún partido político”, agregó.