La venta de Telecom a Fintech sería en varias etapas y concluiría en dos años

Mañana se presentan las condiciones del acuerdo entre David Martínez y Telecom Italia por la filial argentina.

Telecom Italia tiene decidido irse de la Argentina, pero su salida se dará en el plazo de dos años y medio y en cuotas, con la posibilidad de dar marcha atrás con el proceso en caso de que el gobierno no apruebe el cambio de manos.

Las últimas versiones sobre la compra de Telecom Argentina por parte del multimillonario David Martínez indicaban que el primer tramo será por el 17% de las acciones de Sofora, la firma que controla la filial criolla de la telefónica.

Fintech, propiedad de Martínez, y Telecom Italia deberán presentar mañana las condiciones del acuerdo, ya que se vence el plazo para analizar la propuesta que hizo el mexicano hace un mes para quedarse con el 68% de los papeles de Sofora por U$S960 millones. El magnate mexicano también exigió el management por dos años.

En rigor, con este primer tramo de la venta del 17% de las acciones, Telecom Italia seguiría controlando la filial argentina, porque aún tendría en sus manos el 51% de los activos y con ello el manejo de la compañía. Pero el acuerdo estipularía la compra de la parte restante en el transcurso de dos años, o dos años y medio.

De todas formas, como se trata de un servicio público, luego de presentar la operación, deberá pasar por el filtro de la Secretaría de Comunicación, que viene demorando la venta. La adquisición no estará exenta de complicaciones, ya que Martínez tiene una parte de Cablevisión y la Ley de Medios prohíbe que un proveedor de telefonía también brinde servicio de cable. Por eso el contrato habilitaría al empresario azteca a devolverle las acciones a Telecom en caso de que el gobierno no apruebe la operación. 

Si bien David Martínez históricamente mantuvo una buena relación con los Kirchner -incluso apoyó públicamente a la Argentina en la pelea con los fondos buitres-, La Cámpora que maneja la Secretaría de Comunicaciones a través de Norberto Berner, se resiste a aprobar su ingreso en Telecom porque considera que el empresario es cercano al CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, de quien es socio en Cablevisión.