Córdoba

Todos contra todos en el kirchnerismo cordobés tras la salida de Scotto

Eduardo Accastello, Ernesto Bernabey y Daniel Giacomino se pelean por las candidaturas a gobernador e intendente.

La sorpresiva renuncia de Carolina Scotto a su banca de  diputada nacional y más relevante aún, su salida del escenario político cordobés, donde había debutado con bastante éxito en 2013, dejó huérfanos a los kirchneristas, que imaginaban a la ex rectora de la Universidad Nacional de Córdoba como el mascarón de proa electoral del año que viene.

Scotto parecía la figura ideal para superar la eterna dificultad del kirchnerismo cordobés de lograr resultados electorales, cuando menos dignos. El Frente para la Victoria sólo lograba mejorar sus índices cuando empalmaba la boleta local con las elecciones presidenciales.

Scotto había logrado vencer esa rutina con una buena perfomance en 2013, aunque en alguna medida opacada por la aparición del macrismo como una fuerza electoral sobresaliente en la provincia.

Así, Scotto era la carta que el kirchnerismo pensaba jugar para la Gobernación o para la Intendencia capitalina.

Al retirarse la ex rectora, por razones inconfesables (porque no las confesó), el mundo del oficialismo nacional quedó huérfano en la provincia de Córdoba.

Los más rápidos, o en mejores condiciones para hacerlo, se lanzaron a ocupar el espacio.

Hace un tiempo que Eduardo Accastello, el intendente de Villa María, manifiesta sus intenciones de pelear por la Gobernación, aunque en el mundillo kirchnerista miran con recelo su actitud contemporizadora con el peronismo que lideran José Manuel de la Sota y Juan Schiaretti.

Los otros candidatos 

Igual, de todas las veces que amagó con ir por la gran batalla provincial -y fueron muchas-, en ésta aparece como más decidido.

Pero también el propio reemplazo de Scotto en la Cámara de Diputados, Ernesto “Tatú” Bernabey, ex intendente de Villa del Totoral, se sumó a la pelea.

Bernabey cuenta con el apoyo de intendentes kirchneristas del interior provincial.

Y ahora, el diputado nacional Daniel Giacomino anunció que buscará una proeza política que no tiene antecedentes en la ciudad de Córdoba: ser elegido dos veces intendentes luego de un período en el llano.

La gestión de Giacomino en el período 2007-2011 fue gris, pero como su sucesor, el radical Ramón Mestre, navega en dificultades, el ex socio político de Luis Juez cree que puede volver al Palacio 6 de Julio. Se sostiene en que el 90 por ciento de los cordobeses lo conoce, y a partir de allí considera que puede crecer en un terreno electoral, el capitalino, en el cual con el menos del 40 por ciento de los votos se puede ganar (como fue el caso de Mestre en 2011).

“¿Alguien piensa votarlo a Mestre luego de la gestión que ha tenido?”, preguntó desafiante quien el 2 de octubre hará su acto de lanzamiento formal, un latiguillo que repitió ante los medios y en las redes sociales.

Así las cosas, el kirchnerismo cordobés se debate hoy entre las pretensiones casi personales de Accastello, Bernabey y Giacomino, mientras sigue vacante el liderazgo de la fuerza.