Scioli buscó cerrar la polémica por la inflación, después de mostrarse con Kicillof

El gobernador Daniel Scioli salió hoy a tratar de ponerle punto final a la polémica por la inflación que se desató ayer con un fuerte cruce entre Santiago Montoya y Jorge Capitanich.

"No voy a retroalimentar una cuestión que no es lo que le interesa a la gente, que lo que quiere es que le cuidemos el trabajo, el bolsillo", sostuvo Scioli al ser consultado acerca del cruce entre el presidente del Grupo Baproy el jefe de Gabinete.

El mandatario bonaerense no opinó directamente sobre las cifras de inflación, pero dijo que tiene "buenas expectativas" porque "lo que viene va a ser muy bueno para el país" y explicó que "una vez pasada esta situación del frente externo, las posibilidades para invertir son inmejorables".  

Montoya había dicho que el nivel de inflación era "inaceptable, y el chaqueño salió a acusarlo de "opositor". El ex recaudador se sintió ofendido y dijo que ni siquiera Néstor Kirchner lo maltrató por criticar a la Casa Rosada. Además, aclaró que no piensa pasarse a la oposición.

Por su parte, Karina Rabolini señaló hoy que "la inflación es un problema y requiere muchísima atención". Una declaración sencilla y de gran sentido común, pero acaso por eso mismo irritante para el kirchnerismo duro.

La presidenta de la fundación Banco Provinciadijo que "quizás en algunas cosas", el mandatario provincial "tendría otras ideas de cómo solucionar" los problemas que el kirchnerismo no logra solucionar, aunque aclaró que "él acompaña una vez tomada la decisión para que se tenga éxito".

"Daniel va a continuar lo que considere que está bien y cambiar lo que considere que se debería hacer de otra manera o quizás con otro estilo, porque Daniel tiene su estilo de hacer las cosas. Es una persona que tiene diálogo con todas las políticas y tiene esa capacidad de gestionar", señaló Rabolini.