Trabajadores de Lear vuelven a protestar por el hostigamiento de Smata

Denuncian ataques y amenazas del gremio de Pignanelli, en complicidad con la empresa. Cortan Panamericana.

Ante un fuerte operativo de la Gendarmería, los trabajadores de la autopartista Lear protestaban esta mañana frente a la planta ubicada en la Panamericana,en reclamo de la reincorporación de 61 despedidos y para denunciar el hostigamiento de Smata. 

Los manifestantes permanecieron en torno a sus carpas ubicadas a un costado de la colectora Panamericana, y después de las 8 de la mañana comenzaron a cortar la autopista ante la amenaza de la Gendarmería de dispersarlos con gases lacrimógenos.

Después de momentos de extrema tensión, los manifestantes acordaron con los jefes del operativo liberar tres carriles para garantizar la circulación. Mientras tanto, Sergio Berni sobrevolaba la zona en un helicóptero en lo que se lo veía casi colgando.

"Queremos la reincorporación de los 61 despedidos y repudiamos el hostigamiento que sufrimos por parte de una patota del sindicato SMATA, que hasta nos llegó a arrojar gas pimienta", sostuvo a DyN el delegado Gustavo Farías y denunció que la empresa le prohibía esta mañana el ingreso en la fábrica, al igual que al resto de los delegados. 

Ayer, el delegado Rubén Matu denunció que lunes y martes hubo "ataques, violencia y amenazas contra los miembros de la Comisión Interna por parte de la patota del SMATA dentro de la planta de Lear, dirigidos por la propia empresa".

"Vamos a denunciar penalmente a la empresa por estar los gerentes al mando de estos ataques, agravándose hoy con el uso de gas pimienta contra nosotros, con empujones, golpes y lesiones, y terminando nuevamente como ayer fuera de nuestros puestos de trabajo", agregó.

"Estas agresiones tienen el objetivo de que nos retiremos de nuestros puestos de trabajo", explicó Matu. El delegado envió un telegrama a la empresa donde sostiene que los ataques tienen como fin que "haga algo contra su voluntad, esto es que me retire del puesto de trabajo, del establecimiento laboral o que no ingrese como pretende la dirección de la empresa, con el único y evidente propósito de impedir el contacto con todos mis compañeros de labor”.