Riesgo Default

Kicillof y su pronóstico sobre el default: "El 30 no vamos a tener ningún problema"

"Nadie quiere festejar, ni festeja un default", reconoció el ministro, pero dijo que el fallo de Griesa es "extorsivo" e "incumplible".

Obstinado en defender su postura de que un default no será tan perjudicial como pagarle a los fondos buitres, el ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que el país no sufrirá consecuencias si el 30 de julio no logra destrabar la negociación con el juez Thomas Griesa.

"El 30 (de julio, cuando se cumpla el plazo legal para pagarle a los bonistas que entraron al canje) no vamos a tener ningún problema", dijo esta mañana Kicillof en un encuentro de ministros de Economía de la UNASUR y del Banco del Sur en la sede de la Cancillería.

Como anticipó LPO hace diez días, Kicillof terminó convenciendo a Cristina Kirchner que el impacto de un default no será tan grave como el de 2001 ya que los mercados considerarán que fue Griesa quien terminó forzando esa situación. La postura de las calificadores de riesgo -que terminan definiendo por ejemplo las tasas que se le cobran al país para tomar deuda o créditos- hasta ahora no le está dando la razón.

Ayer este medio reveló en exclusiva el detalle del plan de Cristina y Kicillof, que son los únicos con poder de decisión real sobre este tema. Ante la negativa de Griesa de reponer el stay, el plan es entrar en default el miércoles y aguantar seis meses hasta que venza la cláusula RUFO, con el fin de evitar una avalancha de reclamos del 92% de bonistas reestructurados.

Contra todos los pronósticos, la Presidenta y el ministro creen que el país puede pilotear el temporal con financiamiento propio. "Va a ser duro, pero podemos aguantar", se esperanzó Cristina ante los funcionarios que la vieron en los últimos días. "Ella cree que en enero se sienta a negociar con los buitres, les paga y todo terminado", resumen sus intérpretes, preocupados por las consecuencias del default en una economía en recesión.

Las palabras de hoy de Kicillof ante los funcionarios sudamericanos van en línea con la postura y el discurso que el Gobierno ha desplegado para evitar que la cesación de pagos no derive en otros dos riesgos legales: que los bonistas reclamen la totalidad de lo adeudado por la cláusula de aceleración de los bonos y el cross default (que implicaría que se caiga la reestructuración).

Esa estrategia incluye anticipar el pago de los vencimientos, pese a que como dijo Kicillof"hay un bloqueo del cobro que está funcionando como un instrumento extorsivo para el país". "Argentina va a seguir cumpliendo con todas sus obligaciones", recalcó.

En ese sentido, el ministro indicó que el Gobierno "está dispuesto a pagar en condiciones justas y equitativas", pero afirmó el fallo de Griesa "es incumplible", porque "si le pagamos el 100 por ciento al uno por ciento, el 92 por ciento (que entró al canje) tendría derecho a reclamar lo mismo".

Kicillof dijo que "el único objetivo de los que quedaron afuera (de los canjes) fue el de litigar en los tribunales para obtener el 100 por ciento", por lo que consideró que el país está siendo sometido a una "extorsión" y a un fallo "inédito, insólito e incomprensible" además de "incumplible".

El funcionario señaló también que"nadie quiere festejar, ni festeja un default" y detalló que "después de un default hay que reestructurar, pero si (un fallo judicial ordena que) hay que pagar el 100 por ciento, eso no tiene sentido económico". 

"No podemos pagar lo que nos piden porque desencadenaría juicios multimillonarios del 92% restante (…) No es que Argentina no tenga vocación de negociar, todo lo contrario. (El reclamo) pone en riesgo las reestructuraciones de deuda soberana, pagar lo que piden desencadenarían reclamos que se han calculado entre u$s 120, y 240 mil millones para la Argentina, estimó en relación a la cláusula RUFO.

Finalmente, Kicillof dijo que esto es parte de un "violentísimo ataque de sectores recalcitrantes del sistema financiero" para "tirar abajo el proceso de reestructuración de la de la deuda y volver a la dinámica del sobreendeudamiento".