Crisis automotriz

Scioli dictó la conciliación obligatoria en Gestamp tras el reto de Cristina

La presidenta le había pedido que ponga la cara y el gobernador actuó e informó que se terminó la ocupación.

El gobierno bonaerense dictó la conciliación obligatoria en el conflicto de la empresa autopartista Gestamp, luego de que Cristina Kirchner le exigiera “poner la cara” en el conflicto.

La protesta en la autopartista comenzó hace quince días con marchas y el martes un grupo tomó la planta, lo que generó la paralización de las actividades en esa empresa y complicó a compañías del sector que debieron discontinuar su producción por falta de insumos.

El ministro de Trabajo, Oscar Cuartango, y su colega de Producción, Cristian Breitenstein, se instalaron a las 8 en la planta de Escobar para notificar de la conciliación a los manifestantes por un plazo de quince días.

Minutos después informaron que la conciliación había sido acatada y que por lo tanto la fábrica podría volver a funcionar.

Cuartango actuó ni bien Cristina Kirchner dijo en un acto en el sur que hay que hacerse "cargo" de un conflicto y en clara referencia a Scioli dijo que "no se puede estar únicamente para la sonrisa, muchas veces también hay que estar para la responsabilidad".

Al parecer, el reto de la jefa de estado no cayó bien en la gobernación bonaerense donde destacaron que desde hace varios días se viene trabajando en el tema e incluso a primera hora de hoy dos ministros se presentaron en la planta para que los trabajadores acaten la conciliación obligatoria.

La conciliación fue dispuesta por el Ministerio de Trabajo de la provincia para resolver el conflicto entre la empresa Gestamp Baires S.A. y sus trabajadores.

La conciliación también exigió "la reincorporación de los trabajadores, el normal desarrollo de las actividades en la empresa" e instó a las partes a "no adoptar ninguna medida de fuerza mientras esté en vigencia" la resolución del Ministerio.

El área de Seguridad provincial colocó una red por debajo de la grúa puente a modo de prevención dado que en ese sitio se habían instalado en los primeros días los manifestantes.

La protesta comenzó hace quince días con marchas y el martes un grupo tomó la planta, lo que generó la paralización de las actividades en esa empresa y complicó a compañías del sector que debieron discontinuar su producción por falta de insumos.