Investigan una presunta estafa de empresas de colectivos con los subsidios

En el Ministerio de Transporte creen que se pagaban unos 30 millones de pesos mensuales de más a las empresas.

El Ministerio del Interior y Transporte investiga una posible estafa de las empresas de colectivos con los subsidios que cobran por el transporte urbano de pasajeros.

Según el diario La Nación, la cartera descubrió fuertes inconsistencias entre los datos que surgen de las máquinas del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) y los números que las compañías presentaban para cobrar los subsidios.

Los datos oficiales indican de abril, el primer mes en el que se cruzaron los datos, revelaron que mensualmente se entregaban subsidios por 13 millones de metros cúbicos de gasoil cuyo consumo no se puede justificar con los recorridos. 

Los datos de kilómetros recorridos permitieron detectar que sólo en el área metropolitana se pagaban por compensaciones al combustible 30 millones de pesos de más por mes. "La suma da unos 350 millones por año que se habrían estado pagando de más, y sólo en los servicios que tienen SUBE", dijo a La Nación una alta fuente de la cartera, aunque se sospecha que la cifra podría ser casi el doble.

De acuerdo con los cálculos oficiales y tomando en cuenta los kilómetros efectivamente recorridos se podrían haber estado pagando alrededor de 600 millones de pesos más por año (a valores de hoy) a los colectivos del área metropolitana.

Para Daniel Millaci, presidente de la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la diferencia surge de los errores de cálculo que hicieron en el Ministerio. "Las máquinas tienen muchos errores. Hay algunas marcas que arrojan errores de 5 por ciento y otras cuyas diferencias van hasta 15 por ciento. Además, se tomaron como base los datos de febrero, en los que siempre hay menos servicios por las vacaciones, y a eso se le aplicó una estacionalidad. Entonces hay muchas diferencias. Es por eso", dijo el empresario.

Las sospechas partieron de la subsecretaría de Gestión Operativa del Transporte, a cargo de Gerardo Otero, que desde fines del año pasado maneja todas las herramientas para controlar los pagos a los transportistas. La implementación del nuevo sistema tení como fin terminar con la modalidad de que las empresas sólo presentaban una declaración jurada como requisito para cobrar.

Las quejas de los empresarios llevaron al ministerio a aplicar algunos cambios para subsanar errores en los GPS que tienen las máquinas del SUBE y mediante las cuales se hacen los cálculos. Pero igualmente los números no coincidieron y la liquidación determinó una diferencia de 30 millones de pesos (o 13 millones de metros cúbicos de gasoil).

El sistema actual compensa a los colectiveros de dos maneras. Por un lado, les da un subsidio como compensación tarifaria; por el otro, un cupo de litros de gasoil a precio subsidiado. Ambos conceptos se calculaban, hasta abril, sobre la base de la declaración jurada que presentaban los transportistas, completó La Nación.