Sindicalismo

Los gremios opositores esperan una señal de Rosada antes de llamar a otro paro

La idea es darse un plazo razonable y si no hay ninguna respuesta avanzarán en un paro de 48 horas.

Los gremios que ayer pararon el país están dispuestos a hacer una medida más fuerte si Cristina se niega a atender sus reclamos, pero se tomarán un tiempo para ver si existe una reacción desde la Casa Rosada, una clara diferenciación con la izquierda.  

Tal como adelantó LPO enero, el planteo inicial que Luis Barrionuevo acordó con Hugo Moyano era ese: iniciar “un plan de lucha”, que no se agote en un solo día de paro como en 2012, que pasó desapercibido.

“Siempre tenemos la vocación de diálogo y la búsqueda de consenso. Para eso Cristina tiene que atender los reclamos por ganancias, inflación, jubilaciones y obras sociales”, le dijo a LPO Roberto Fernández, jefe de la Unión Tranviario Automotor (UTA), que ayer paró subtes y colectivos por todo el país.

Fernández, quien hasta el año pasado integraba la CGT oficial, no quiso participar de la conferencia de prensa con Moyano y Barrionuevo (“Prefería estar con los míos”, se defiende), pero está dispuesto a seguir sus pasos si nada cambia.

“Nos vamos a volver a reunir y si hace falta volveremos a tomar una medida de fuerza, pero va a ser mayor que este. Eso lo tenemos claro”, agregó el colectivero, que recién pudo cerrar la paritaria después de mitad de año.

Un paro mayor consistiría en un paro de 36 a 48 horas, que si repitiera los alcances de ayer sería el mayor golpe gremial al kirchnerismo.

En el Gobierno, hasta ahora, sólo dieron señales con el impuesto a las ganancias: los sindicatos oficialistas aseguran que terminadas las paritarias se evaluará subir el mínimo no imponible, que el año pasado fue elevado a 15 mil pesos.

Lo que pocos imaginan es que al menos Cristina entable un nuevo diálogo con estos líderes sindicales, que hasta hace unos años hablaban seguido con Carlos Tomada.

Además, las paritarias del año pasado se retrasaron tanto que esperar a que finalicen todas las negociaciones es casi esperar que termine el año y sólo la CGT Balcarce acepta esos plazos.