Máximo quiere ser gobernador y Cristina no lo deja

Quiere repetir la carrera de su padre, pero la mamá se resiste. Su estrecho círculo de confianza.

Máximo Kirchner quiere repetir la carrera política que hizo su padre para llegar a la presidencia, aunque tiene un obstáculo impensado: su propia madre, la presidenta.

Si bien el hijo mayor del matrimonio Kirchner incide directamente en las decisiones de su mamá Cristina, nunca tuvo participación en la política a través de los comicios.

Desde hace varias semanas se instalaron los rumores que indican que Máximo podría pelear por la intendencia de Río Gallegos, la misma que su padre gobernó desde 1987 hasta 1991, cuando fue electo gobernador de Santa Cruz, la provincia que comandó hasta llegar a la presidencia en 2003.

Máximo se mueve en un reducido círculo de gente. El ex chofer de Kirchner, Rudy Ulloa, es el único que lo acompaña en todas sus aventuras y trabaja con Carlos Zannini, el otro hombre que incide en las decisiones de Cristina.

Otro es Osvaldo Sanfelice, un empresario socio de Néstor y ahora de su hijo mayor en los negocios inmobiliarios de la familia. El tercero es Hernán Reibel, que a través de la estratégica subsecretaría de Comunicación Pública de la jefatura de gabinete controla la multimillonaria pauta oficial del Gobierno.

Ninguno de ellos lo desalienta a darle el puntapié inicial a su carrera electoral, pese a que no tiene una intención de voto auspiciosa en Río Gallegos. 

Aunque el problema de Máximo y del Gobierno en territorio santacruceño es mayor: no tienen candidato para frenar la llegada a la gobernación del radical Eduardo Costa, que el año pasado ganó las elecciones en Santa Cruz con el 42 por ciento de los votos contra el 24% del Frente para la Victoria.

Es por eso que en La Cámpora barajan dos alternativas para enfrentar a Costa. Una es arreglar con el actual gobernador Daniel Peralta, que nunca terminó de romper con el kirchnerismo por la cantidad de intereses que tienen en común. La otra, más arriesgada, es apurar la carrera electoral de Máximo y llevarlo de candidato a gobernador.

Pero la mamá de Máximo no quiere que su hijo corra los mismos riesgos que su padre y que ella misma, y se opone que sea candidato a gobernador, aunque no tendría reparos en su candidatura a intendente de Río Gallegos.