Congreso

¿Massa gana o pierde con la oposición al nuevo Código Penal?

Especialistas destacan los riesgos de un mensaje dirigido a la gente. La estrategia del diputado.

Sergio Massa logró volver a posicionarse en el centro del tablero político son su frontal oposición al anteproyecto de reforma del Código Penal. Analistas consultados por LPO evaluaron el riesgo que tomó el líder del Frente Renovador al retomar la iniciativa con una campaña en contra de una reforma que todavía no terminó de cristalizarse y que fue trabajada por una comisión que lideró el juez de la Corte Eugenio Zaffaroni e integraron referentes de todos los partidos políticos.

Sin embargo, las objeciones académicas -las más suaves lo tildan de apresurado- no parecen hacer mella en el entorno de Massa, donde esta noche celebraban haber logrado el objetivo inicial: Las encuestas que manejan reflejan que el 84% de la población coincide con su postura. "Sigan atacando al cartero que la noticia ya está en la gente", se ufanó Massa en televisión. 

Su plan era hablarle directamente a "la gente", sin importar la respuesta que llegara de juristas entendidos en la materia, quienes ya lo calificaron de oportunista y demagogo. “Quisimos dirigirnos a Doña Rosa y ahí estamos ganando 8 a 1”, festejaban esta noche.

La respuesta de la gente ya puede verse en números: En las primeras cuatro horas que la consigna “Noalareformapenal” fue publicada en las redes sociales cosechó 16 mil adhesiones y el sitio web tuvo 45 mil visitas. Esta noche en facebook la inciativa ya superaba los 19 mil "Me Gusta".

“Massa se apoyó en la opinión pública generalizada, que no logra distinguir en cuestiones técnicas y tiene una posición más punitiva. Pide endurecer la legislación y hasta más represión”, sostuvo ante LPO el consultor Ricardo Rouvier,

“Se agarra de algo que es cierto, que es que hay muy pocas condenas. Privilegia su posición con la opinión pública, pero podría jerarquizarse al menos pidiendo un debate amplio en todo el país”, agregó el consultor, concediendo que su iniciativa si bien efectiva, puede tildarse acaso de "efectista".

Los riesgos

El fantasma de Juan Carlos Blumberg y Francisco de Narváez, que también tuvieron su cuarto de gloria de la mano de la bandera de la "mano dura", sobrevuela el tour de force del líder del Frente Renovador. 

El riesgo de recibir en el mediano plazo el desencanto por prometer soluciones impracticables tiene antecedentes recientes: Fue el propio Blumberg quien empujó una reforma penal que no trajo los resultados esperados y que además rompió la lógica interna del Código, que la actual reforma intenta emprolijar (por ejemplo, la pena para los secuestradores luego de la reforma Blumberg es mayor que la prevista para los asesinos).

“Nuestro caso es distinto, sólo proponemos impedir un cambio. Si no se cambia el Código será nuestro triunfo. Y si se cambia, cuando empiecen las excarcelaciones y estalle la bronca de la gente, apuntará a todos menos a nosotros", evaluaban en el massismo, donde están convencidos que se trata de una estrategia win-win. 

Esta parece ser la lectura que empieza a permear en otros sectores políticos: Julio Cobos también rechazó el anteproyecto y sus legisladores de Mendoza planean conciliar con sus pares massistas una declaración conjunta de rechazo a la reforma del Código Penal, que luego podría extenderse a la Legislatura de Tucumán.

Cobos aprovecha la polémica para diferenciarse de los sectores tradicionales del radicalismo que integraron la comisión de reforma, representados por Ricardo Gil Lavedra, no casualmente uno de los que más duro criticó a Massa.

Es que esa es la otra ventaja que ven en el massismo a la iniciativa: Los deja solos en el lugar de verdaderos opositores al kirchnerismo, mientras enchastra a la UCR y el PRO con un apoyo al Gobierno en un tema que encabeza hoy todas las encuestas de preocupación de la gente. "Ellos quedan del lado del garantismo que la sociedad rechaza", afirmaron a LPO.

De hecho, uno de los más golpeados es el PRO que sumó a Federico Pinedo a  la Comisión redactora y ahora sufre el desencanto de sectores de derecha que no comprenden porque la fuerza que consideraban propia aparece en esta polémica junto a Cristina Kirchner y Zaffaroni.

“El sábado todos los flashes estaban en Cristina Kirchner y él logró desviarlos para su lado con un discurso efectista que no quiere decir efectivo. Massa es un diputado nacional que sacó un millón de votos y está generando una candidatura”, sostuvo el consultor Carlos Germano en diálogo con LPO.

Pero para Germano los riesgos existen: “Maximizar la atención puede ser beneficioso en algunos casos pero en otros es riesgoso por el devenir de los hechos”, advierte.

Analía del Franco va en el mismo sentido: “Tiene que tener un timming para que esto no tenga una consecuencia negativa. La gente se siente enfadada cuando las propuestas no tienen consistencia”, afirmó a este medio.

Embalado, Massa no se detiene y milita el tema “20 horas por día”, aseguran sus seguidores. “Si con esto estamos en escena dos meses, ya será un triunfo”, destacan, aunque el líder del Frente Renovador es más modesto en sus aspiraciones y concede que la polémica se irá diluyendo.