Allanaron las oficinas de Lázaro Báez

La Policía Federal llevó a cabo el operativo en el Pasaje Carabellas y en otra oficina céntrica del empresario K, luego de la denuncia por por lavado de dinero y evasión fiscal que presentó Elisa Carrió

Por orden del juez en lo Penal Tributario, Javier López Biscayart, la Policía allanó las oficinas de Lázaro Báez en Capital, en el Pasaje Carabellas 241, según publicó Clarín. 

Se trata de una denuncia por evasión fiscal que se inició esta semana tras una denuncia de los diputados nacionales Elisa Carrió y Fernando Sánchez. La denuncia también busca que se investigue a la presidenta Cristina Kirchner.

Según fuentes judiciales, el operativo se llevó a cabo en Pasaje Carabellas y en otra oficina céntrica de Báez con personal de la División Asuntos Jurídicos de la Policía Federal. La Justicia sospecha de una maniobra de evasión impositiva para el pago de ganancias. En el primer domicilio se llevaron cajas con documentación. En cambio, en la otra oficina no encontraron nada que tenga valor.

En el edificio de Pasaje Carabellas hay oficinas de Austral Construcciones y de otras empresas de Báez. En el 4º piso están las oficinas de Báez, su hijo Martín y Julio Mendoza, presidente de Austral. Ahí también funcionó la financiera Invernes, conocida en la Patagonia como “Inversiones Néstor”, por el ex presidente Néstor Kirchner.

En esas mismas oficinas, muy poco visitadas por Báez, se habría contado un "préstamo personal" de 7 millones de dólares que Néstor Kirchner le envió al empresario patagónico, según denunció el ex presidente de las petroleras de Lázaro Báez, Horacio Quiroga. Aquel episodio habría tenido lugar en octubre de 2010.

López Biscayart, el mismo juez del caso Skanska, también le pidió a la AFIP que informe todas las direcciones fiscales de las empresas de Báez en Santa Cruz. Y más temprano le tomó declaración testimonialal periodista Hugo Alconada Mon, autor de la investigación.

El juez Sebastián Casanello, que investiga la denuncia de lavado de dinero en la justicia federal, hasta ahora no había allanado ese edificio. Solo había ordenado operativos, mediante la PSA, en las oficinas de la financiera SGI, pero los efectivos llegaron cuando ya se había retirado toda la documentación sensible. La maniobra quedó registrada en las cámaras de seguridad.

Carrió y Sánchez basaron su denuncia en artículos periodísticos del diario La Nacion que reveló una maniobra sobre contrataciones de empresas de Báez en hoteles vinculados con los Kirchner. De acuerdo a documentos secretos, que el empresario K intentó censurar, Báez y los Kirchner firmaron convenios para que siete empresas vinculadas al primero le pagaran a los hoteles el alquiler de habitaciones que garantizaban la cobertura de al menos un tercio de sus habitaciones, en temporada alta o baja.

A raíz de la información publicada, Báez se autodenunció en el juzgado federal de Río Gallegos y dijo ser víctima de una campaña en su contra. La maniobra fue ganarle de mano a Carrió y dejar en manos de una jueza ligada al kirchnerismo los eventuales delitos en torno a los hoteles. Pero no lo logró. También pidió a través de una cautelar que se impida la publicación de la investigación.