El Gobierno llamó a extraordinarias por el pliego de Milani pero Pichetto quiere bajarlo

Capitanich firmó el decreto para tratar el impuesto a los bienes de lujo y acuerdos diplomáticos y militares, entre los que está el del virtual jefe del ejército, acusado por delitos de lesa humanidad. El miércoles se trata en Comisión pero el jefe del bloque K podría bajarlo en el recinto. Mensajes del Cels. 
El Gobierno convocó a sesiones extraordinarias para diciembre, con una agenda que incluye el proyecto para aplicar impuestos a la compra de bienes de lujo y pliegos diplomáticos y militares, entre los que se encuentra el asenso a teniente general del virtual jefe del ejército César Milani.

Pero en el Senado no hay garantías de que el pliego pase el filtro del bloque oficialista, como viene repitiendo Miguel Pichetto cada vez que le preguntan propios y aliados.

Con la orden de Cristina de tratarlo, el rionegrino volvió a hacer de las suyas: según confiaron a LPO fuentes del Senado, ya estuvo sondeando algún aliado para que se exprese en contra y sepulte a Milani. 

Es una vieja estrategia que aplica cada vez que quiere bajar algo. Lo hizo con el propio jefe del ejército en junio, cuando los aliados fueguinos salieron a rechazarlo; y el año pasado apeló a una rebelión mediática de Roxana Latorre para enterrar a Daniel Reposo como procurador general.

“Es sencillo, Miguel está buscando aliados para una cosa y para la otra”, grafican en la Cámara.

El primer síntoma de que todo puede repetirse fue la semana pasada: El Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) amplió su presentación contra Milani en la Comisión de Acuerdos. 

La entidad de Horacio Verbitsky fue la que en julio modificó su postura inicial para repudiar a Milani junto a la procuradora Alejandra Gils Cargó y obligaron a la presidenta a posponer el debate. Verbitsky y Gils Carbó tienen llegada a Carlos Zannini, también interlocutor de Pichetto.

Esas declaraciones y la leve rebelión entre los aliados fue suficiente par que Cristina planchara el pliego del Director de inteligencia y entonces subjefe de la fuerza, quien de todos modos ejerció su cargo estos meses, aún sin el rango de teniente general.

A Miliani se lo acusa de haber participado en presuntos delitos de lesa humanidad durante la última dictadura en La Rioja y Tucumán.

En la primer provincia se lo vincula a la detención de Ramón Alberto Olivera y en la otra a la desaparición del ex soldado Alberto Ledo. En julio, Olivera ratificó que Milani lo presionó en un interrogatorio.

Este fin de semana, organizaciones sociales, políticas y sindicales de La Rioja ratificaron las denuncias contra Milani.

“Por mucho menos hemos echado gente del ejército y lo hemos festejado. Va a ser difícil que esto pase”, confió a LPO una fuente con llegada al ejército.

El primer síntoma de la insistencia de Cristina en el pliego fue la semana pasada, con una entrevista que Milani le concedió a la revista de las Madres de Plaza de Mayo. Hebe de Bonafini, como pocos, habla cuando quiere con Crisitna y Zannini. 

Aunque en el Senado no confirman que el pliego del polémico militar será incluido, hubo apuro en llamar a la Comisión de Acuerdos

El secretario parlamentario Juan de Estrada la llamó para el miércoles a las 14. Tuvo que hacerlo él porque vencieron los mandatos de sus integrantes, cada fuerza deberá redefinir sus integrantes.

El único de los actuales miembros que no seguirá en el Senado es el neuquino Horacio Lores, que votaban siempre con el Gobierno.

La comisión tiene a la espera 250 ascensos militares y entre los nombramientos diplomáticos se destaca el del ex ministro de Economía, Hernán Lorenzino, como nuevo embajador argentino ante la Unión Europea (UE).

Otros pliegos pendientes, que también dan para la polémica, son los de conjueces de la Cámara Federal de Casación Penal, una lista de juristas afines al Gobierno como el constitucionalista Edgardo Barcest y abogados de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo.