La basura, un conflicto repetido
Daniel Scioli reavivó la polémica al pedirle a Mauricio Macri que reduzca la cantidad de basura que envía a la provincia diariamente. Como hacer es mejor que decir, la Ciudad está dispuesta a dialogar para encontrarle una solución rápida al problema.
En su discurso de asunción, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, reavivó una vieja polémica con Mauricio Macri, al pedirle "colaboración" al Gobierno porteño "para que reduzca en un plazo razonable el envío cotidiano de toneladas de basura.
El Gobierno porteño implementó a lo largo de estos cuatro años de gestión diferentes medidas para concientizar y educar a la población, entre ellas la implementación de contenedores en diferentes esquinas de la Ciudad, y la más actual de las medidas es la presentación de un nuevo sistema de reciclado en origen.
Teniendo un conocimiento de las importantes políticas ambientales que se están llevando a cabo en la Ciudad, resulta difícil dejarse convencer por los argumentos de Scioli. De todas maneras, a este tipo de acusaciones y peleas sin fundamentos ya nos tienen acostumbrados.
Además, hay que recordar que el CEAMSE (Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado), que es una de las empresas que mayor cantidad de basura procesa para su destino final, presta servicios tanto a la Ciudad de Buenos
Aires como a otra treintena de municipios del conurbano bonaerense donde se genera casi la mitad de los residuos que se procesan en aquella empresa, por lo que no se puede responsabilizar exclusivamente a la Ciudad por el problema de la disposición final.
Retomando las palabras del ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Diego Santilli, le recuerdo al Gobernador bonaerense que mejor que decir, es hacer. Lo invito a la reflexión y a que le brinde soluciones concretas a los vecinos en cuanto al tratamiento de los residuos, ya que sus políticas ambientales para el conurbano no fueron del todo positivas.
Desde la Ciudad están dispuestos a dialogar y a encontrar soluciones conjuntas para que el problema de la basura tenga una solución más rápidamente. Argentina debe encaminarse hacia un cambio de paradigma en materia ecológica y a través de la colaboración y el consenso se encontrará el camino correcto para hacerlo.
El Gobierno porteño implementó a lo largo de estos cuatro años de gestión diferentes medidas para concientizar y educar a la población, entre ellas la implementación de contenedores en diferentes esquinas de la Ciudad, y la más actual de las medidas es la presentación de un nuevo sistema de reciclado en origen.
Teniendo un conocimiento de las importantes políticas ambientales que se están llevando a cabo en la Ciudad, resulta difícil dejarse convencer por los argumentos de Scioli. De todas maneras, a este tipo de acusaciones y peleas sin fundamentos ya nos tienen acostumbrados.
Además, hay que recordar que el CEAMSE (Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado), que es una de las empresas que mayor cantidad de basura procesa para su destino final, presta servicios tanto a la Ciudad de Buenos
Aires como a otra treintena de municipios del conurbano bonaerense donde se genera casi la mitad de los residuos que se procesan en aquella empresa, por lo que no se puede responsabilizar exclusivamente a la Ciudad por el problema de la disposición final.
Retomando las palabras del ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Diego Santilli, le recuerdo al Gobernador bonaerense que mejor que decir, es hacer. Lo invito a la reflexión y a que le brinde soluciones concretas a los vecinos en cuanto al tratamiento de los residuos, ya que sus políticas ambientales para el conurbano no fueron del todo positivas.
Desde la Ciudad están dispuestos a dialogar y a encontrar soluciones conjuntas para que el problema de la basura tenga una solución más rápidamente. Argentina debe encaminarse hacia un cambio de paradigma en materia ecológica y a través de la colaboración y el consenso se encontrará el camino correcto para hacerlo.