Desde Carta Abierta ahora dicen que el Gobierno “debe aceptar que no lo apoyan”

El filósofo Ricardo Forster dijo que "un sector de la sociedad está tocado por algunos episodios como la tragedia de Once y las inundaciones". Aunque remarcó que "El Gobierno tampoco puede cambiar su política por lo que diga la gente". Ayer, Horacio González pidió "tomar nota" del reclamo. 
Tal como se esperaba, la multitudinaria marcha de anoche contra el Gobierno nacional despertó la reflexión de los intelectuales. Tal es el caso del grupo Carta Abierta, desde donde remarcaron que “el Gobierno tendrá que aceptar que una parte de la sociedad no la apoya” aunque también señalaron que el oficialismo debería “tomar nota” de los reclamos.

El filósofo y ensayista Ricardo Forster dijo que "el Gobierno tendrá que aceptar que una parte de la sociedad no la apoya y el otro sector, encontrar quien lo canalice". De todos modos, explicó que “tampoco el Ejecutivo puede transformar su política en función de lo que quiera la gente”.

“Un sector de la sociedad está tocado por algunos episodios como la tragedia de Once del año pasado y las recientes inundaciones de la ciudad de La Plata. El sector que se manifestó es muy antagónico al Gobierno y está bien que sea así”, dijo en diálogo con la radio Once Diez.

Además, Forster describió que en la multitudinaria jornada de anoche se vio reflejado que "para los que hablan de una sociedad que marcha al totalitarismo, la movilización mostró que se pueden ejercer los derechos". En ese sentido opinó que “las marchas en Argentina a veces tienen una visión en negro y catastrofal del país”.

En esa línea, ayer el director de la Biblioteca Nacional consideró difícil que el cacerolazo dé vida a un nuevo liderazgo político y planteó que el kirchnerismo debería tomar nota de los reclamos.

“Hasta el momento, de las grandes movilizaciones en la Argentina, como en el mundo, hechas a través de las redes mediáticas o las sociales, no acostumbran a generar grandes liderazgos. Así pasó en otros países muy lejanos”, expresó González en diálogo con misma radio.

Al respecto, consideró “necesario” que el Gobierno tome en cuenta a los reclamos de cacerolazos. Puso como ejemplo que, en Venezuela, “Capriles tomó muchos temas del espacio bolivariano” o que, dentro del peronismo, “cuando Menem le ganó a Cafiero fue porque tomó temas de Cafiero; y cuando ganó Cafiero tomó temas de Menem”.

En esa línea, el sociólogo consideró: “El Gobierno está ante la necesidad de tomar reivindicaciones institucionalistas. Y lo ha demostrado en ciertos cambios, en las reformas que propone para la Justicia. Así como el sector de la oposición tiene un valor central que es seguir alrededor del republicanismo y la no-reforma de la Constitución, evidentemente también tiene que tomar temas de justicia social, la redistribución de la renta”.