El dueño de Colihue atacó a LPO por su investigación: "Me chupan la pija"

El empresario y miembro de Carta Abierta, Aurelio Narvaja, se indignó cuando Clarín lo indagó sobre la revelación que hizo LPO. "Quieren hacer un escandalete", afirmó e insultó al periodista: "Me chupan la pija", aclaró. Este medio reveló que el Gobierno le compró libros por 27 millones de pesos.
Aurelio Narvaja no pudo mantener el tono reflexivo e intelectual que tienen los miembros de Carta Abierta y estalló en furia cuando Clarín lo indagó sobre la nota que La Política Online publicó el viernes pasado: “Exclusivo: Los millonarios negocios entre Sileoni y Carta Abierta”.

Allí, se informaba que la editorial Colihue había sido beneficiada con la compra de libros que anunciará en estos días la presidenta Cristina Kirchner (lo iba a hacer la semana pasada pero se pospuso por el temporal en La Plata y esta semana debió cancelarse por la disfonía de la mandataria). La empresa de Narvaja recibió unos 18,3 millones de pesos por la compra de libros. Pero además, Ediciones del Sol, una empresa que sería propiedad del hijo Narvaja fue beneficiada por unos 9 millones de pesos.

Ediciones del Sol no tiene página web propia y publicita sus textos en el mismo sitio de Colihue (http://www.colihue.com.ar/catalogoSOL). En el listado de compras realizadas por el Estado a Ediciones del Sol, aparecen libros que ni siquiera están en su catálogo. Además, en el mercado aseguran que esta editorial no factura anualmente ni el 10% de lo que le está comprando el Gobierno.

El diario Clarín retomó hoy esa investigación de LPO y consultó a Narvaja acerca de las sospechas que generó esa compra entre funcionarios y editores. “Ustedes por el diario de mierda en el que están lo que quieren hacer es un escandalete del tipo de La Política Online”, le dijo el psicólogo al periodista de ese medio.

El dueño de Colihue trató de defenderse de las acusaciones y señaló que, en comparación con editoriales más chicas, el Estado le compró poco a la suya: “Me compraron menos de lo que hubiera correspondido”. Además, indicó que “hay otras compras sorprendentes” y alegó que “el ministerio quiso poner la lupa sobre editoriales nacionales”.

“¿Vaya y pregúntele a las otras: ¿qué mierda es lo que venden?”, continuó indignado. Como para que quedara clara que estaba enojado, Narvaja le quiso poner un título algo informal a la nota. “Puede poner eso: dice Narvaja que le chupan la pija los que dicen eso. Es un buen titular”, gritó antes de colgar el teléfono.