Kicillof fue el funcionario más criticado por la crisis eléctrica

Desde junio el viceministro de Economía está a cargo del sector eléctrico, y por eso fue el foco de las críticas en las redes sociales. Mientras analiza los costos empresa por empresa, el déficit de las distribuidoras no para de crecer y ahora Cammesa trasladó la crisis a las generadoras. "Se avanza hacia un esquema en donde la única salida es la estatización", advirtió un economista.
Después del repentino apagón que ayer dejó sin luz a media Capital Federal y varios partidos del Conurbano, Axel Kicillof fue el funcionario que se llevó más críticas. En las redes sociales la gente ironizaba sobre su efectividad como hombre fuerte del sector energético.

“Apagòn! y Axel Kicillof, donde está?”, “la energía depende de kicillof, que bien trabaja este muchacho. "El Modelo" funciona”, “El corte de luz de ayer fue una manera de celebrar los casi tres meses que pusieron a Kicillof a cargo del mercado eléctrico nacional”, bromeaban vía tweeter.

Es que desde fines de junio el viceministro de Economía viene desplazando a Julio de Vido en lo que respecta a materia energética. Sus primeros pasos los dio con la expropiación de YPF y después se metió en el sector eléctrico, para lo que les pidió a las distribuidoras todo tipo de informes y balances para sus estudios.

Sin embargo, hoy el encargado de salir a explicar los motivos del colapso ocurrido ayer fue el ministro de Planificación y no Axel, quien así se vio desautorizado por la presidenta.

“Kicillof pretende que los operadores pongan la plata de su bolsillo para cubrir el déficit y eso no tiene sentido, no van a invertir si la empresa da pérdida”, explicó a LPO un economista. “Se está yendo hacia un esquema en donde la única salida termina siendo la estatización”, analizó preocupado.

Este especialista cree que la solución tendría que haberse planteado algunos años después del fin de la Convertibilidad, en el 2004 o 2005, con la fijación de un nuevo esquema de tarifas que vaya reduciendo de a poco los subsidios.

Durante un seminario organizado por ex secretarios de energía, el economista de Fiel Fernando Navajas planteó que actualmente existen 2 caminos en la encrucijada energética: uno de ellos consiste en la estatización del sector, formando un monopolio estatal “verticalmente integrado”, con Cammesa e YPF a la cabeza; mientras que el otro se enmarca en un esquema mixto similar al que actualmente tiene Brasil, en donde "el estado altera la formación de precios y garantiza la expansión de la oferta".

La visión de Kicillof

Es que el viceministro de Economía se encuentra en una encrucijada. Hace casi un mes le había prometido a Oscar Lescano entre 30 y 45 días para resolver la crisis de las eléctricas, que ya dejaron de pagarle a la administradora Cammesa. El problema es que por ese mismo motivo la compañía mixta controlada por La Cámpora dejó de pagarle a las generadoras, amenazando con colapsar todo el entramado eléctrico.

Por el momento, el economista del Cenda sigue sin dar respuesta a los empresarios y sindicalistas. En el mercado creen que está pateando la decisión para más adelante, hacia el año que viene, para así evitar el costo político de un aumento de tarifas o el económico de incrementar los subsidios.

“Se está avanzando muy rápidamente, se ha propuesto un cambio de esquema que es público porque ha salido en los diarios que está más fundado en la necesidad del país y en los costos del país que en los precios internacionales”, había advertido el funcionario durante una exposición en el Senado.

“Es complicado”, reconoció aquella vez. Aunque agregó que “sin embargo, hemos cambiado un poco el aire y estamos profundizando en un plan que nos parece que va a ser exitoso”, se esperanzaba.

“Nuevamente, cuando dicen: ‘No hay resultado, no hay resultado’, creo que revertirlo y ordenarlo va a llevar algún tiempo y la exploración en búsqueda de hidrocarburos, primero, está sujeta a un riesgo y, segundo, tampoco en dos o tres meses se puede ver”, se atajó, ante las críticas que se le hacen sobre su ritmo de estudio, tan lejos del acelerado pulso político.

“Antes las tarifas estaban dolarizadas y eran de las más caras del mundo en dólares para todos los servicios públicos que se habían privatizado; ¿era algo llamativo, no? Hoy hay algunos que hablan de atraso tarifario, de aumentos tarifarios, pero lo cierto es que es una política deliberada de mantener tarifas que estén sosteniendo la competitividad y las condiciones de vida de la población”, explicaba en ese entonces. 

Las eléctricas reconocieron que las ganancias extraordinarias obtenidas durante la década de los noventa ya se han esfumado a lo largo de todos estos años en donde no hubo aumento de tarifas y costos crecientes.

Sin embargo las palabras de Kicillof dejaron en claro que no habrá aumentos y que no está dispuesto a aumentar subsidios. Incluso, el funcionario ya aclaró que el año que viene, como el gobierno prevé un mayor crecimiento económico, espera bajar el gasto público.

Además durante ese discurso, Kicillof hizo referencia al plan que dio a conocer a fines de agosto, durante una reunión con los directivos de las distribuidoras denominado “costo plus”. El mismo consiste en fijar una tasa de ganancia “razonable” para las empresas a partir de un análisis integral de sus costos, teniendo en cuenta los balances no por cada empresa por separada sino por grupo económico.

Es decir tiene como base toda la cadena, generación, transporte y distribución, algo a lo que los empresarios del sector -que en muchos casos están posicionados en los tres segmentos- se resistían, para evitar que se le compensen las ganancias de un tramo con las pérdidas del otro.

Para calcular la rentabilidad, Kicillof propuso sumar patrimonio neto y deuda financiera, restándole activos redundantes, y dijo que eso da capital total empleado. Sobre ese número le fijará una ganancia "razonable".