Ahora Cristina quiere modificar la ley de ART para despegarse del lobby de Brito y la UIA

El banquero y el industrial siguieron de cerca la votación del Congreso que sancionó los cambios al régimen de accidentes laborales. Lograron frenar el proyecto de Tomada, quien de todos modos tendrá que ampliar la cobertura para evitar otro ataque judicial. Tras la presión sindical estudian barrer las ART.
José Ignacio de Mendiguren y Jorge Brito llevaron las riendas del proyecto que modifica los accidentes de Trabajo sancionado esta semana Diputados, con la CGT y la CTA disidentes protestando afuera y los diputados sindicales en contra.

El jefe de la Unión Industrial Argentina fue el artífice de la norma, tanto, que logró archivar un proyecto integral diseñado por el ministro de Trabajo Carlos Tomada, que tenía un centenar de artículos y modificaba la actual ley de accidentes de trabajo, sancionada en 1995.

Como adelantó LPO, Tomada se enteró por un llamado de Cristina Kirchner que su proyecto, que ya había circulado entre algunos ministros provinciales, gremialistas y empresarios, quedaría archivado por otro que contemplara más claramente la imposibilidad de que el trabajador vaya a Tribunales tras cobrar una indemnización.

“No hay que politizar este debate. Acá se trata de 800 millones de dólares por año que salían de las empresas y no iban a los trabajadores”, protestó De Mendiguren, tras la sanción de la norma.

El jefe de la UIA fue testigo directo de la presentación de la ley, en un acto que lideró Cristina Kirchner en Tecnópolis y aprovechó para celebrar el día de la industria. Un marco de festejo pleno.

“Pensar que nos llamaron a nosotros para que nos sentemos es poco serio”, respondió a LPO una diputada oficialista que nunca le falla al jefe de bloque, Agustín Rossi.

Otra diputada asegura que el training de este año con sanciones express disciplinó a los legisladores. “Cuando sancionamos en diciembre la ley antiterrorista (que para muchos criminalizaba la protesta social) hubo mucho revuelo. Ahora no”, comparó.

Fuentes de la Cámara baja aseguraron escuchar a diputados conocer de la presión de Brito y De Mendiguren para que no dudaran en pulsar el botón verde.

Una vez más, el quórum fue sobre la hora, aunque algunos diputados oficialistas ingresaron un poco después. Pero no sobró nada.

Y en lo que ya es un clásico de las sesiones 2012, Eduardo “Wado” De Pedro, diputado de La Cámpora y mano derecha de Cristina Kirchner, ingresó último para adjudicarse un quórum que jamás se encarga trabajar. Es una tarea de María Teresa García.

La influencia de Brito sobre la política kirchnerista es conocida y este año tuvo un nuevo capítulo. Con la firma del ministro de Economía, Hernán Lorenzino, le prestó 300 millones de pesos a la gobernación de Mendoza. Un llamado suyo, después de acciones así, puede valer más que el de un ministro.

Correcciones y ¿fin de las ART?


En otra muestra de que se trató de una ley a las apuradas, sin siquiera margen de correcciones de forma, Tomada prepara para la semana próxima una resolución para ampliar las enfermedades que deben cubrir las aseguradoras.

Es que el Gobierno olvidó que una buena parte de los juicios que reciben las empresas se debe a que las aseguradores, por alguna razón, se niegan a pagar.

Así lo planteó Héctor Recalde en su exposición, cuando defendió su dictamen de minoría que según muchos diputados kirchneristas es similar a la ley sancionada, sólo que reivindica la actuación del fuero laboral sobre el civil, lo que para algunos legisladores no e más que corporativismo. 

No sería la única reforma que planearía Cristina Kirchner para reparar algo del descrédito que recibió entre algunos sectores progresistas por esta ley. Estudiaría par más adelante eliminar definitivamente las Aseguradores de Riesgos de Trabajo.

Así especulan algunos diputados kirchneristas que siguieron las negociaciones. Sería por esa rezón que en su discurso de cierre Agustín Rossi comparó este proceso con que terminó con la nacionalización de las AFJP.

“Recuerden lo que sucedió con las AFJP, no las nacionalizamos de un día para el otro: primero modificamos el régimen, permitiendo que se pudiera salir del sistema de las AFJP y volver al de reparto; después dispusimos que los que no optaban quedaban dentro del sistema de reparto, y luego agregamos el inciso q) para orientar las inversiones de las AFJP”.

“Me parece que ese es un elemento a tener claramente en cuenta para analizar la creación de las mutuas con este sistema”, completó Rossi.

Las Mutuas son aseguradoras que harían los propios gremios para evitar la intervención de privados y que, se supone, en el futuro reemplazarían a las ART.

Por ahora, sólo hay una ley que evita la judicialización, según el Gobierno, por una indemnización más justa y pagada en tiempo y forma.