Unidos y Organizados dice que no es un golpe, pero acusan a Magnetto y los caceroleros

La agrupación cristinista que lidera La Cámpora afirmó en un comunicado que la protesta de gendarmes y prefectos no es un golpe de Estado y hasta se solidarizo con el reclamo. Sin embargo, afirmó que el CEO de Clarín, junto a los caceroleros y hasta los alumnos de Harvard fogonea un clima de inestabilidad.
La agrupación Unidos y Organizados, que lidera La Cámpora e integran Kolina, Nuevo Encuentro y el Movimiento Evita, afirmó en un comunicado que la protesta de los cuadros mas bajos de Gendarmería, Infantería -a la que se sumó la Armada-, no es un golpe de Estado como deslizaron dirigentes de la primera línea del kirchenrismo.

Unidos y Organizados incluos afirmó en su comunicado que "comprendemos el justo reclamo de los afectados en su salario por la implementación contraria al sentido de un decreto que cumplía con un fallo de la Corte Suprema de Justicia".

Esa es la tesis que por estas horas impera en el Gobierno, que se trata de un conflicto salarial que se salió de control por una mala implementación del decreto que reorganiza los salarios de las fuerzas de seguridad, a la que se sumó una pésima conducción del conficto una vez disparado.

El comunicado de Unidos y Organizados -cuya importancia radica en que se trata acaso de la expresión política mas cercana a Cistina Kirchner-, agrega que "el objetivo del decreto 1307/12 es recomponer la escala salarial para terminar justamente con las inequidades en beneficio de los que menos ganan, quienes por culpa de una sospechosa equivocación en la liquidación se vieron increíblemente perjudicados por una decisión presidencial en su beneficio".

La culpa es de Magnetto

Luego como es habitual en el kirchnerismo en su discurso público, se adjudica la crisis a los medios y en especial a Clarín. Puntualmente condenan la "manipulación espuria de la información por parte de los históricos enemigos de la democracia está intentando conducir un conflicto que ya se encuentra solucionado a lugares oscuros a los que los argentinos no queremos ni estamos dispuestos a volver".

"Son los mismos que fogonean la violencia y el golpismo abiertamente los que intentan generar un clima de desestabilización a través de una serie de hechos que van en escalada de forma casi guionada por el señor Magnetto", agrega el texto.

Para luego sumar a la supuesta maniobra golpista a las conducciones de las fuerzas, a quienes protestaron con cacerolas y hasta a los alumnos que preguntaron a Cristina en Harvard.

"Los mandos medios y altos de Prefectura y Gendarmería que cobran muchísimo más que el resto, los que atrás de las cacerolas esconden un profundo desprecio por la democracia, los dirigentes que traicionan los intereses de sus representados, las tristes operaciones de desprestigio contra la presidenta en su reciente viaje a Estados Unidos forman parte de la reacción de ese pequeño sector de la sociedad que aceptó la conducción de un empresario mafioso como Magnetto para volver atrás y recuperar sus oscuros privilegios", sostienen.

Para luego afirmar que "los efectivos de las fuerzas de seguridad son parte del pueblo trabajador y humilde que no se debe dejar engañar por los que nos sometieron a humillaciones durante años, por los que asesinaron, torturaron y persiguieron a compatriotas para que unos pocos empresarios se llenen los bolsillos".

Reiterando que son los "medios monopólicos" los que habrían "fogoneado" las protestas de gendarmes y prefectos, que curiosamente al inicio del texto reconocen que fueron provocadas por los descuentos que sufrieron en sus sueldos.

Concluye finalmente Unidos y Organizados que "no es casualidad que estas confusas situaciones que esconden claras intentonas destituyentes y golpistas se producen cobardemente cuando la presidenta se encuentra en el exterior representando a nuestro país y a los intereses de la región".