Cinosi: El hombre de Zannini para cortarle a Cristóbal el monopolio del juego

Gustavo Cinosi es el dueño del Sheraton Pilar y un habitual lobbysta de la embajada de Estados Unidos. De relación estrecha con el influyente Carlos Zannini, prepara su desembarco en el mundo del juego con el aval de la Casa Rosada. La pelea por el Prode y las apuestas deportivas.
Cristina Kirchner ha demostrado que es una apasionada de equilibrar poderes. Le encanta ascender y con la misma rapidez bajar de un plumazo a sus funcionarios, a quienes suele martirizar colocando justo abajo suyo un contrapeso letal. Lo sabe Guido Lorenzino que sufre a Axel Kicillof, Julio Alak a Julián Alvarez, Nilda Garré a Sergio Berni, Norberto Yahuar a Emilio Pérsico, Daniel Scioli a Gabriel Mariotto y ahora Mariotto a Martín Sabbatella. “Le encanta mandar paracaidistas a los paracaidistas”, resumió ante LPO uno de los hombres que mejor la conoce.

Se trata además de una pasión que excede la política y se sumerge en los negocios, un mundo en el que el kirchnerismo se ha tomado el trabajo de edificar y demoler fortunas.

Y parece que finalmente al zar del juego Cristóbal López, le está por surgir un contrapeso de las mismas entrañas del poder.

El elegido es Gustavo Cinosi, un polifacético empresario, dueño del Hotel Sheraton Pilar de vínculo fluido con la embajada de Estados Unidos, un país que tal vez no casualmente, ahora Cristina Kirchner parece empeñada en seducir.

Este hábil hombre de negocios es casi un alter ego del influyente secretario Legal y Técnico, Carlos “Chino” Zannini. De hecho, Cinosi compite en cercanía con el hoy más cercano consejero de la Presidenta, con otro de los grandes beneficiados del ciclo kirchnerista, el titular de Electroingeniería, Gerardo Ferreyra.

De manera que avalado por su amigo en la Casa Rosada, Cinosi plantea un primer desembarco en el juego en el área de apuestas deportivas. Se trata de un negocio que ambiciona Cristóbal López quien ya compró un software especial en España para canalizar este tipo de apuestas por Internet.

Y detrás de la movida estaría el viejo proyecto de reeditar un Prode modernizado.