La Came se bajó del próximo viaje a Angola porque incluyeron a La Salada

La iniciativa del Secretario de Comercio por conquistar el mercado del país africano ya generó rispideces dentro del sector empresario. Moreno no avisó que entre los 300 directivos que hicieron el primer viaje habría hasta puesteros de La Salada, lo que generó resquemores dentro de la Came. Por eso decidieron bajarse de la próxima expedición.
En su afán por lograr que la balanza comercial del país se reduzca lo menos posible, Guillermo Moreno no sólo puso todo tipo de trabas a las importaciones, sino que tuvo la insólita idea de impulsar viajes a diversos países para que los empresarios abran nuevos mercados.

El primero de ellos fue a Angola, en marzo pasado. La idea del poderoso Secretario de Comercio era gastar lo menos posible, y lo cumplió a rajatabla. Los más de 300 empresarios que lo acompañaron no viajaron en primera línea sino en los asientos más económicos y se hospedaron en hoteles de dudosa categoría.

La comitiva estaba compuesta en su mayoría por pequeños y medianos empresarios, y según palabras de Moreno, “unos 20 grandes”, como Bunge, Fiat y la Aceitera General Deheza. Pero entre todos ellos también había puesteros de La Salada y el Mercado Central, representando a los dos lugares que concentran un comercio informal que mueve millones y en donde compran sectores con niveles de ingreso de lo más variados.

La Came, entidad que nuclea a medianos empresarios, viene luchando contra este tipo de actividades. Los delegados que viajaron a África no estaban al tanto de la presencia de estos comerciantes y grande fue su sorpresa cuando tuvieron que sentarse a su lado mientras atravesaban el Atlántico.

LPO dialogó con Jorge Bizet, quien estuvo durante esos agitados días, quien aclaró que a pesar de las diferencias el trato fue muy cordial. Pero que enseguida quisieron sacar fotos registrándolo junto a sus "enemigos" que al difundirse generaron problemas políticos dentro de la Cámara.

“Si lo hubiera sabido de antemano, no habría ido”, indicó. Por eso decidió bajarse del próximo viaje al país africano Angola planeado por el secretario para la segunda mitad de mayo. Para esta ocasión el funcionario aumentó los esfuerzos y organizó una feria criolla que concluirá un día antes de que la misma presidenta arribe al continente negro. Para esta movida ya zarpó un “arca” a costo 0 repleta de animales vivos y maquinaria que se expondrán allí durante 3 días y que en estos momentos se encuentran armando los trabajadores del Mercado Central.

“La perspectiva de un empresario es hacer negocios, por lo que yo volvería a ir, pero no así, no podemos ser mezclados”, analizó Bizet, quien asegura que su cámara “defiende a los verdaderos ciudadanos que pagan sus impuestos”.

Es que para los negocios que tienen su mercadería y empleados en blanco, los puestos ubicados en La Salada fueron como su perdición. Los costos que manejan son muy inferiores por la fuerte evasión de impuestos que practican, por lo que los productos de las medianas empresas se ven muy perjudicados a la hora de competir.

Bizet advierte que muchos de estos negocios se inscriben como monotributistas con ese objetivo, pero luego superan la facturación que corresponde bajo esa modalidad jurídica, por lo que tendrían que anotarse como Responsable Inscripto y pagar la suma de impuestos correspondiente, que llegaría a un 35%. “Si nos sacan ese 35% de impuesto nosotros también tendríamos precios más baratos”, sostiene el titular de las firmas Clan y Sime.

Y extiende la crítica hacia los puesteros del Banco Central, el bastión por excelencia del Secretario de Comercio Interior y su lugar predilecto para ubicar productos básicos a precios casi imposibles. “Yo creo que tiene un interés directo con ese sector”, señala Bizet, y remarca la tienda de ropa que se encuentra allí, del mismo tipo de las que se encuentran en La Salada.

Más allá de las diferencias

A pesar de estos resquemores, este empresario textil considera acertada la iniciativa de Moreno. Consultado acerca de la potencialidad del mercado angoleño, explicó que “existe un 7 u 8 por ciento de la población que es muy rico” y que es hacia ese sector donde apuntan los capitales argentinos.

Bizet contó que no todo se pudo vender durante el viaje, que fue una pequeñísima parte, pero que sirvió sobre todo para hacer contactos, con los que todavía realiza negociaciones para ubicar sus productos textiles en el continente negro.

Angola es un país que prácticamente no tiene industria, y esa es la veta que buscan explotar los empresarios argentinos. Su principal producción es de bienes primarios, principalmente de petróleo. Un bien que está en el centro de la coyuntura política y económica actual argentina. Además, es un país abundante en oro y piedras preciosas. De todas formas Bizet aclara que “no creo que se acuerde un trueque, porque es muy difícil de implementar”.

Ahora Brasil, pero con mujeres

Mañana zarpará una comitiva de 150 empresarios hacia Brasil en un charter. “Vamos a San Pablo, vamos, vendemos y volvemos”, es la directiva expeditiva de Moreno, que en el exigente viaje a Angola ya estaba manteniendo reuniones con sus acompañantes apenas 5 horas después de aterrizados.

A diferencia del viaje a Angola, esta vez sí habrá mujeres en el equipo. El funcionario partirá junto a la secretaria de Comercio Exterior, Beatriz Paglieri, la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Nahon, el subsecretario de Comercio Internacional Carlos Bianco y la Subsecretaria de Integración Económica Latinoamericana y Mercosur, Agustina Vila.

Por el contrario, en la visita al país africano Moreno evitó incluir al sexo femenino, según bromeó, por  “porque le tenemos miedo a los hombres angoleños”. En realidad, según pudo saber LPO la excusa que usó el secretario fue la dificultad para ubicarlas en cuartos donde la mayoría eran hombres. Aunque si esto era así, ¿por qué no organizaba algunos cuartos exclusivamente para mujeres y listo?