San Isidro

Denuncian un negociado entre Posse y un club de rugby

Las autoridades del municipio cedieron el Bosque Alegre, un espacio natural de dos hectáreas, al Club Atlético San Isidro para que pueda construir tres canchas de rugby. Tras las quejas de los vecinos, el intendente Gustavo Posse se comprometió a preservarlo. Pero esta madrugada comenzó el desmonte. Tensión en el predio.
Esta madrugada, los vecinos de San Isidro se encontraron con máquinas topadoras y tractores en el Bosque Alegre, un predio natural de dos hectáreas, y estallaron de furia. Cerca de 50 personas lograron detener el desmonte, mientras denunciaban directamente al intendete Gustavo Posse por "privatizar un espacio que es de todo el municipio".

En medio de un clima muy tenso, con presencia de Gendarmería, los vecinos discutían con funcionarios del municipio, que intentaban desmentir las denuncias.

"El problema comenzó en septiembre del año pasado, cuando comenzó el desmonte. Ahí supimos que habían cedido el predio al CASI para que puedan construir tres canchas de rugby. Nos reunimos con todos los funcionarios, incluso con Posse, y primero nos dijeron que lo que se contruya sería de todos, pero ya pasó los mismo con otras canchas de fútbol en el Campo Nº 6. Son privatizaciones encubiertas", contó Simón Virasoro, en diálogo con LPO.

Y agregó: "Finalmente se comprometieron a no avanzar con el desmonte. Creímos que habíamos conseguido frenar este negocio, pero nos equivocamos. Esta mañana nos encontramos con que ya estaban cortando árboles, limpiando un bosque que tiene un valor ecológico muy importante".

El secretario medioambiente de San Isidro, Carlos Prassel, dijo que en realidad "se está limpiando el predio sin tirar un sólo árbol" y remarcó que su municipio es el que tiene "más áreas protegidas del país". Y se quejó: "Hay mucho nerviosismo. Están buscando confrontar fisícamente".

"Lo que dice Passel es mentira. Acá están los árboles cortados, hay un montón de troncos por el piso. Están las fotos, está la evidencia. Es una mentira. Acá lo que hay es un negocio entre Posse y el CASI, que vendió el predio que tenía en Escobar, y ahora se quiere quedar con este, que casualmente está a cuatro cuadras de su sede central", refutó Virasoro.