Mastellone: “Es altísima la tasa de impuestos a la producción”

Lo advirtió el gerente de La Serenísima, Roberto Blousson, en una conferencia sobre perspectivas para el sector lácteo. "Antes era normal que el 20% de los costos de una compañía vayan a impuestos, pero hoy manejamos hasta un 50%", aseguró. Duras críticas al control de precios y a las restricciones para exportar.  
El gerente de Mastellone Hnos. (La Serenísima), Roberto Blousson, se despachó este martes con duras críticas al Gobierno nacional por las políticas que se vienen destinando al sector lechero desde mediados del mandato de Néstor Kirchner.

“Lo que me asusta del modelo (kirchnerista) es la altísima participación en los costos de producción de alimentos”, advirtió Blousson en el marco de las Jornadas Forratec 2012, a la que asistió La Política Online en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).

“Antes era normal que el 20% de los costos de una compañía láctea vayan a impuestos, pero hoy manejamos hasta un 50%”, se quejó el empresario, para luego mencionar que “el sector lechero seguirá viviendo a los saltos y no creo que lo podamos cambiar”.

Para el directivo de la firma láctea, el sector tiene una serie de desafíos por delante en lo referente, principalmente, a la política cambiaria y crediticia que, según consideró, no son las propicias para lograr inversiones genuinas y generalizadas a largo plazo.

“La lechería es muy sensible a los cambios de política cambiaria porque estamos haciendo referencia a un producto con un gran componente social y ante una devaluación como las que hubo en el país se necesita capital intensivo”, señaló.

“El tema de los créditos a mediano y largo plazo es un asunto que requiere un análisis detallado de toda la cadena dado que hay una notoria falta de poder financiero por parte de los productores tamberos que impide salir adelante”, agregó.

Pero Blousson no se quedó ahí. A la hora de analizar el daño que produjeron algunas medidas tomadas en los últimos años, no ahorró críticas y fue contundente a la hora de calificar, por ejemplo, los controles de precios o las restricciones a las exportaciones.

“Hay temas que hicieron mucho daño como el control de precios. Hoy Doña Rosa cree que tiene que pagar lo mismo un litro de leche que un litro de agua; y no se da cuenta que paga el doble por un litro de Coca Cola”, apuntó.

“El control de las exportaciones es una locura total: el mercado local está abastecido. El sector tiene una creciente dependencia de los mercados externos y estoy convencido que no podemos renunciar a ser un exportador de lácteos por excelencia”, añadió.

Asimismo, el gerente de Mastellone también hizo referencia al proceso de cierre de tambos que atravesó el país en los años 2008 y 2009 a partir del congelamiento de precios de la materia prima y a la sequía que afectó a las principales cuencas lecheras.

“Los tambos que se cierran, casi todos son por problemas familiares de sucesión o porque pierden competitividad a lo largo de los años; pero son muy pocos los que se van porque el negocio no les gusta”, afirmó.

Exportaciones

En 2011 las exportaciones argentinas de productos lácteos fueron de 406.966 toneladas versus 309.218 toneladas en 2010, por el enorme incremento en la producción, según recientes datos del Senasa.

Las colocaciones de leches realizadas el año pasado fueron de 232.996 toneladas (+34% que en 2010), mientras que las ventas de derivados fueron de 114.408 toneladas (+33%) y las de quesos de 59.562 toneladas (+21%).

Venezuela, Brasil y Argelia –en ese orden– concentraron el 69,8% de las importaciones de leche en polvo argentina, mientras que Brasil representó el 43,7% de las compras de quesos realizadas en 2011. El tipo de queso más exportado fue mozzarella con 23.735 toneladas, seguido, se segundo lugar, por Gouda con 7900 toneladas.

En cuanto a los derivados lácteos, los principales productos que integraron este rubro en 2011 fueron suero de leche con 28.034 toneladas, proteína de suero láctico con 18.411 toneladas, manteca con 17.090 toneladas, suero de queso con 13.570 toneladas, proteínas lácticas con 7983 toneladas y caseína láctica con 7856 toneladas, entre otros.

Los principales compradores de derivados lácteos en 2011 fueron Brasil con 20.626 toneladas, China con 13.597 toneladas, Chile con 8126 toneladas y Japón con 7511 toneladas, entre otras naciones.