El presidente de IRSA fue a la Legislatura a defender la Dubai de Costanera Sur

Eduardo Elsztain se apersonó en la Comisión de Ecología para despejar dudas sobre el proyecto del barrio Solares de Santa María en la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors que el macrismo busca aprobar. El tratamiento se demoraría unas semanas, pero el PRO conseguiría la primera lectura antes de fin de año.
El macrismo apretó el acelerador para lograr el consenso necesario para aprobar el convenio entre el gobierno porteño y la firma IRSA que estipula la construcción de un barrio en la ex Ciduad Deportiva de Boca Juniors y sentó en la Legislatura al propio titular de la empresa, Eduardo Elsztain.

Elsztayn expuso en la Comisión de Ecología y dejó más tranquilos a los legisladores de la oposición que mantienen algunos reparos con el proyecto, sobre todo en materia ambiental.

Es que el empresario aseguró que con la construcción de este barrio cerrado con 11 torres en un plazo de 12 años, no se tocará la Reserva Ecológica ni de los humedales costeros, una de las principales preocupaciones de los diputados opositores.

Elsztayn señaló que "hace catorce años IRSA compró catorce hectáreas con permiso de construcción de 716.180 metros cuadrados, en base a un proyecto que lo pensamos para décadas".

El empresario agregó que la propuesta urbanística "favorece la tendencia de promover la zona sur" e "incluye nueve accesos directos a la ciudad y un recorrido sobre la costa del río de la Plata abierto a todos, con viviendas, comercios y hoteles, lo que generará miles de puestos de trabajo para su construcción y luego de terminado".

“Cederemos el cuarenta por ciento de la superficie a la ciudad, de modo que de cada diez hectáreas cuatro serán públicas", remarcó el titular de IRSA.

Si bien el proyecto ya tiene despacho de las comisiones de Planeamiento Urbano, Ecología y Espacio Público, finalmente no ingresará al recinto en la sesión de este jueves, puesto que como indicaron desde el PRO a LPO, continuará “abierto” durante la definición de otras leyes de envergadura como el Presupuesto 2012 y la definición de autoridades en los organismos de control.

Sin embargo, el macrismo busca aprobarlo en primera lectura antes de fin de año.