Scioli quiere convertir en autovía la ruta 88 para potenciar el puerto de Necochea
El Gobernador dio prioridad a un proyecto para convertir en autovía el tramo de la ruta 88 que une Batán con Necochea y un nuevo puente sobre el río Quequén que reemplace al Escurra, destruido por las inundaciones en 1980. La obra será financiada con fondos del Banco Mundial.
En la Gobernación bonaerense sostienen que es uno de los proyectos a los que Daniel Scioli dará máxima prioridad en su segundo mandato. Se trata de la conversión en autovía doble mano de la ruta 88 en el tramo que une Batán con Necochea y la construcción de un puente sobre el río Quequén.
Es en rigor parte de una iniciativa más amplia que busca potenciar el puerto de aguas profundas de Necochea, que podría crecer como alternativa pasa sacar la cosecha de soja de la provincia, además de sumar una nueva terminal de containers.
El anteproyecto ya circula por el ministerio de Infraestructura y será financiado con fondos del Banco Mundial. Se trata de la construcción de una autovía en los 110 kilómetros que unen Batán con Quequén. Ya existe un tramo de 12 kilómetros que funciona como autovía entre las ciudades de Mar del Plata y Batán.
Voceros del ministerio de Infraestructura bonaerense aseguran que el proyecto tiene prioridad para la próxima gestión.
“La prolongación de la autovía garantizaría la posibilidad de comunicación sobre la avenida 542, el acceso a la localidad de Quequén, hacia el río”, explicó a La Política Online, Horacio Tellechea, presidente de la comisión de Obras y Servicios Públicos de la municipalidad de Necochea.
La obra incluirá la construcción de un puente sobre el río Quequén. En carpeta hay varios proyectos, la mayoría coinciden en levantar la obra en el mismo lugar donde estaba el puente Escurra, destruido por las inundaciones de mayo de 1980.
La destrucción de ese puente afectó principalmente a la comunicación en la zona portuaria y en ambas márgenes del río pero perjudicando puntualmente a la zona de Quequén. “La zona donde bajaba el puente perdió desde entonces todo el esplendor de aquellos años”, dice Tellechea.
Más alejados del mar existen actualmente sobre el río tres puentes. El más importante es el Dardo Rocha por el que circulan 13 mil vehículos diarios. Otro es el puente colgante Hipólito Irigoyen con un tránsito de ocho mil vehículos por día.
Sin embargo, el colgante está en reparación en una obra financiada con presupuesto provincial por un monto de $ 4.800.000, por lo que el Dardo Rocha absorbe un caudal de 21 mil vehículos diarios.
Existe un tercer puente sobre la circunvalación muy alejado de la zona urbana y por el que no puede circular el tránsito pesado.
Algunas ideas mencionan un proyecto similar al puente Nicolás Avellaneda que une la Ciudad con la provincia de Buenos Aires. Estiman que deberá contar con tránsito vehicular, de camiones y paso peatonal.
Se habla de la posibilidad de un puente elevadizo utilizando las mismas cabeceras que quedaron del viejo puente Escurra.
Es en rigor parte de una iniciativa más amplia que busca potenciar el puerto de aguas profundas de Necochea, que podría crecer como alternativa pasa sacar la cosecha de soja de la provincia, además de sumar una nueva terminal de containers.
El anteproyecto ya circula por el ministerio de Infraestructura y será financiado con fondos del Banco Mundial. Se trata de la construcción de una autovía en los 110 kilómetros que unen Batán con Quequén. Ya existe un tramo de 12 kilómetros que funciona como autovía entre las ciudades de Mar del Plata y Batán.
Voceros del ministerio de Infraestructura bonaerense aseguran que el proyecto tiene prioridad para la próxima gestión.
“La prolongación de la autovía garantizaría la posibilidad de comunicación sobre la avenida 542, el acceso a la localidad de Quequén, hacia el río”, explicó a La Política Online, Horacio Tellechea, presidente de la comisión de Obras y Servicios Públicos de la municipalidad de Necochea.
La obra incluirá la construcción de un puente sobre el río Quequén. En carpeta hay varios proyectos, la mayoría coinciden en levantar la obra en el mismo lugar donde estaba el puente Escurra, destruido por las inundaciones de mayo de 1980.
La destrucción de ese puente afectó principalmente a la comunicación en la zona portuaria y en ambas márgenes del río pero perjudicando puntualmente a la zona de Quequén. “La zona donde bajaba el puente perdió desde entonces todo el esplendor de aquellos años”, dice Tellechea.
Más alejados del mar existen actualmente sobre el río tres puentes. El más importante es el Dardo Rocha por el que circulan 13 mil vehículos diarios. Otro es el puente colgante Hipólito Irigoyen con un tránsito de ocho mil vehículos por día.
Sin embargo, el colgante está en reparación en una obra financiada con presupuesto provincial por un monto de $ 4.800.000, por lo que el Dardo Rocha absorbe un caudal de 21 mil vehículos diarios.
Existe un tercer puente sobre la circunvalación muy alejado de la zona urbana y por el que no puede circular el tránsito pesado.
Algunas ideas mencionan un proyecto similar al puente Nicolás Avellaneda que une la Ciudad con la provincia de Buenos Aires. Estiman que deberá contar con tránsito vehicular, de camiones y paso peatonal.
Se habla de la posibilidad de un puente elevadizo utilizando las mismas cabeceras que quedaron del viejo puente Escurra.