“Adrián Pérez no puede ser el conductor de la Coalición Cívica”

En una entrevista con LPO, el legislador porteño Juan Pablo Arenaza habló de la crisis que aqueja al partido de Elisa Carrió y de la cercanía de Patricia Bullrich, su referente política, con el PRO. También explicó la situación del bloque en la Legislatura y dijo que Lilita debería reconciliarse con la sociedad.
La crisis interna en la que se sumergió el partido de Elisa Carrió tras la floja performance en las primarias de agosto será el tema principal de la asamblea nacional que la Coalición Cívica organizó para mañana en el Palais Rouge.

Entre otras cosas, se hablará de la turbulenta convivencia de los diputados del bloque en la Legislatura porteña y de la situación de la aliada Patricia Bullrich, resistida por algunos sectores del partido por su acercamiento a Mauricio Macri.

De esos temas conversó con La Política Online el legislador porteño Juan Pablo Arenaza, que pertenece al partido de Bullrich, Unión por Todos y es señalado como uno de los posibles aliados del macrismo.

Arenaza puso en duda la continuidad de su partido dentro de la Coalición Cívica si es que la conducción cae en manos de Adrián Pérez, el candidato a vicepresidente de Lilita. También consideró que Carrió debería alejarse de la escena y reconciliarse con la sociedad.

¿Se va a pasar al bloque del Pro?

No, de ninguna manera. Yo soy fundador de Unión por Todos, que es el partido que preside Patricia Bullrich. Yo creo que lo que sí está claro es que la oposición como existe hoy no va a existir más. Como está configurada la oposición en la Ciudad de Buenos Aires, a partir del 10 de diciembre. Se viene una conformación nueva. Y la gente votó una conformación nueva y los políticos tenemos que entender muchas veces lo que está pidiendo la gente, que es unidad. Creo que en el 2009 la gente premió la unidad con el Acuerdo Cívico, con Unión Pro. Después se pelearon todos con todos. Y la responsabilidad es de todos. Porque Macri se peleó con Solá, los radicales se pelearon con los socialistas y Carrió se peleó con todos. Hubo una responsabilidad de toda la oposición, de no construir algo más unificado. El año que viene hay que trabajar una agenda parlamentaria al menos en esta Legislatura de proyectos que le hacen bien a la Ciudad y trabajar para perfeccionarlos, en conjunto con el Pro. El año que viene creo que va a ser así.

¿Es decir que desde un bloque propio o desde la Coalición funcionaría como un satélite del PRO?

Satélite suena a dependiente. Creo que tiene que ser un trabajo en conjunto de acuerdo a temas esenciales para la Ciudad. Por ejemplo la semana pasada se votó la ley audiovisual y el tema de llevar conectividad a Parque Patricios. Había diputados que no entendían qué es la conectividad, porque la conectividad no es que haya internet, sino que exista cableado para que el internet no se corte nunca. Esa ley la trabajamos más de siete meses en la comisión, hicimos cantidad de reformas. La ley de conectividad que mandó el Ejecutivo tenía un crédito fiscal retroactivo. Pedimos que eso se cambie porque no todas las empresas tienen créditos fiscales y podían entrar a competir en forma desigual. Los del PRO accedieron, se trabajó en forma conjunta, se modificaron una serie de cosas, por lo que llegó al recinto una ley con una cantidad de puntos de acuerdo tanto míos, de Adriana Montes y de otros diputados. Ese día en el que estábamos firmando el dictamen, Delia Bisutti, que preside la comisión, cuando habíamos acordado los puntos dijo que quería un caño para el Estado y no firmó el dictamen. Así me imagino la Legislatura que viene. No me voy a pasar al PRO, pero hay que trabajar en conjunto, trabajar interbloques. Hay que ver cuál va a ser el esquema legislativo.

El propio Macri elogió a Bullrich como legisladora. ¿Es un intento por captarla?

No sé si por captarla. Creo que por el escenario que se viene, hay muchos sectores del PRO que ven con buenos ojos la incorporación de nuevas alianzas. Es la única forma de que los proyectos políticos sumen. La Coalición Cívica creció en el 2007 porque sumó sin prejuicios ideológicos, no tenía límites irracionales. Y salió segunda. Para mí es un elogio que el jefe de gobierno diga que la diputada Patricia Bullrich, que preside mi partido, fue una buena diputada en el Congreso. El PRO quiere gobernar el país en 2015, y la única manera de es sumar gente nueva, construir nuevas alianzas. Eso lo van a tener que hacer.

¿Entonces Bullrich se va a quedar en la Coalición?

Si están dadas las condiciones de amplitud sí, si no no sé que va a pasar. Además yo no puedo hablar por lo que el ARI todavía no decidió. La Coalición Cívica-ARI tiene un congreso mañana. Si la decisión es que Adrián Pérez sea el conductor de la Coalición Cívica… Yo creo que Adrián Pérez no puede ser el conductor de la Coalición Cívica.

Si Adrián Pérez llega a ser el nuevo conductor, ¿qué van a hacer ustedes?

Veremos qué es lo que ocurre. Las ideas y los valores que Adrián Pérez expresa no son los que yo expreso.

¿Cree que Carrió tiene que seguir liderando la Coalición?

No sé si podría seguir siendo la presidenta de la Coalición Cívica. Nosotros decidimos acompañarla en la elección de octubre. Hubo sectores dentro del ARI que plantearon que había que acompañar a Binner, nosotros dijimos que no, que estaba bien que Carrió siguiera. Creo que Carrió es importante para la política argentina. Ha dado batallas duras, se ha puesto al hombro una cantidad de temas y eso obviamente desgasta a una figura. Carrió tiene que alejarse un poco de la escena y reconciliarse con la sociedad. Es una persona valiosa y que hay que tener en la política.

Si no es Carrió ni Adrián Pérez, ¿quién podría ser el conductor del partido?

No sé.

El recambio

¿Cómo ve a la Legislatura tras el recambio legislativo?

La Legislatura a partir del 11 de diciembre se va a expresar en otros términos, que no tienen que ver únicamente con lo que va a hacer la Coalición Cívica, sino todos los sectores. La dinámica de la política argentina de los últimos años es así. Acá lo único que se ordena es el oficialismo, con plata, con poder. La oposición es un gran desorden. Tampoco hubo personalidades que ordenaron a la oposición, hubo vanidades.

¿Qué cree que va a pasar con la Coalición Cívica?

Eso no va a depender de mí, va a depender de las acciones de Carrió. Si Carrió plantea una construcción más amplia. Tengo mucha estima por ella y creo que es muy valiosa para la política argentina. Pero también creo que tiene que leer lo que ocurrió. Si plantea que lo que viene es diferente y se plantean amplitudes, como la Carrió que nosotros acompañamos. Cuando nos incorporamos a la Coalición Cívica era un lugar que sumaba. El Acuerdo Cívico también era un lugar en el que se sumaba y se hacían coaliciones amplias. Después hubo un camino del que nosotros fuimos críticos y decidimos acompañar porque eran las decisiones que se tomaban en la Coalición, pero fuimos muy críticos con la ruptura del Acuerdo Cívico. Y creemos que hay que revertir eso y crear construcciones más amplias.

¿Existen posibilidades de que el bloque efectivamente se rompa?

“Adrían Pérez está cómodo con Binner. Yo también me siento cómodo, con lo que ha hecho en la ciudad de Rosario. Pero no me siento cómodo con lo que hay abajo del FAP, con Libres del Sur, tienen un planteo de país que yo no comparto”.

Si la Coalición se cierra y se pone en un sector ideológico que no es el mismo en el que estuvo hasta hoy, no va a existir más. En ese caso, yo voy a trabajar en otro sentido, no me voy a sentir cómodo ahí. Sé que la diputada Montes tampoco está cómoda si la Coalición Cívica se cierra cada día más. Si se respeta lo que fue la Coalición Cívica el año pasado, va a continuar siendo la Coalición Cívica.

La Coalición Cívica por lo menos en la Legislatura cumplió un rol fundamental. Dentro del desquicio de Proyecto Sur y a veces el avasallamiento del PRO en algunos temas, la Coalición Cívica puso un poco de cordura. De hecho el año pasado gracias a la Coalición Cívica la Ciudad tuvo ley tarifaria, que es la ley que permite recaudar impuestos. Cuando había que poner cordura, estuvimos ahí, y si logramos mantener eso, la Coalición Cívica va a seguir existiendo y se va a fortalecer. Si la Coalición Cívica se cierra en temas ideológicos, límites para todo el mundo, no va a perdurar. Si se va para un lado, como pretenden algunos, de un tinte de centroizquierda y de volver a los orígenes, yo ahí no voy a estar. Yo con el progresismo no me siento identificado.

Es decir que se siente más cómodo con parte del PRO que con legisladores de su bloque como Rocío Sánchez Andía.

Si Rocío está en el norte, yo estoy en el sur.

¿Y cómo logran mantenerse en el mismo bloque?

El año pasado lo logramos. Cuando había que poner cordura la pusimos, pero quizás en estos momentos, cuando uno está atravesando una crisis, las diferencias se acentúan. Además no sé si Sánchez Andía sigue adentro de la Coalición.

¿Hay falta de conducción en el bloque de la Coalición Cívica?

Hay desorganización. El bloque no está organizado, no tenemos reuniones seguidas, entonces ocurren cosas como la de la sesión de la semana pasada.

¿Cree que puede haber una oposición totalmente crítica?

El año que viene se va a configurar una oposición que no vota nada porque no, que va a tener que ver más que nada con sectores de Proyecto Sur, que no votaron absolutamente nada, se pelearon con todos, no proponían alternativas. Eso va a existir. Y van a existir sectores que vamos a trabajar las leyes, vamos a acordar en algunos puntos y en otros no. De hecho el artículo 4 de la ley audiovisual, que plantea la territorialización en el barrio de Chacarita, yo pedí que funcionara en toda la Ciudad de Buenos Aires, como sucede en todo el mundo. En Uruguay funciona en todo el país, en California en toda California, no de esta cuadra hasta esta otra cuadra. Ese artículo lo voté en contra. Pero de ahí a decir que la ley era para Tinelli, para los ricos, ese es un argumento que no tiene ningún sentido.

¿Va a apoyar el resto de las leyes económicas que quiere Macri?

Temas como la ampliación presupuestaria son temas de Estado. Transformamos temas de una gestión en temas políticos. Las cuestiones de Estado hay que votarlas. Que una ciudad con las características de Buenos Aires emita un bono para hacer obra pública es normal, eso ocurre en todas las ciudades del mundo. Nosotros estudiamos el bono, está en los parámetros normales, en las condiciones normales. Después uno puede decir por qué les vas a dar más, si todavía no ejecutaron. Ahí entra a jugar la política, pero lo que es el bono, la ampliación presupuestaria y otro tipo de leyes tienen que ver con la función de una ciudad. No deberían ser leyes polémicas, de división de aguas. El último presupuesto lo tratamos durante dos meses, pasaron todos los ministros, se hicieron modificaciones. Si eso después no se vota, a mí me parece una falta de respeto. Acá hay sectores de la oposición que hacen una oposición rabiosa. Quieren replicar lo que ocurre en el Congreso nacional con lo que ocurre acá y es mentira. Esto lo hemos conversado con gente del PRO. Si ellos en el Congreso nacional critican que el gobierno pone una inflación del 8 por ciento, entonces al presupuesto de la Ciudad pongámosle un índice más real.