“Cristina debería mirar más la políticas públicas de Santa Fe"

La intendenta electa de Rosario cuestionó a Cristina en una entrevista con LPO por minimizar el crecimiento de su provincia. "También se crece construyendo hospitales y escuelas o pagando el 82% móvil", afirmó. Exigió más planes de viviendas y le recomendó a Del Sel moverse en política con un proyecto colectivo.
Cuando Antonio Bonfatti y Miguel Del Sel todavía disputaban voto a voto la gobernación de Santa Fe, la diputada socialista Mónica Fein abandonó su cautela y se encargó de levantar a una nerviosa militancia. “Esta ciudad no improvisa. Es progresista y va a seguir siendo progresista. Hace 22 años que hacemos políticas públicas”, bramó desde el escenario del patio de la madera de Rosario, donde los nervios consumían a los seguidores de Hermes Binner.

La victoria de Fein no corría riesgo desde temprano y su triunfo fue histórico en números: ganó con el 52,18%, algo menos que lo obtenido por Miguel Lifschitz cuando fue reelecto en 2007, pero le sacó más de 20 puntos de diferencia a su seguidor Héctor Cavallero, un ex socialista que se alió al kirchnerista Agustín Rossi.

Fue Lifschitz, justamente, quien la promovió como su sucesora y logró el aval de Hermes Binner. Ambos la tuvieron como secretaria de Salud en Rosario. Fein luego fue concejal y diputada nacional y ahora intendente de una ciudad que hace más de dos décadas vota socialistas para que la gobiernen. En una entrevista con La Política Online, analiza el futuro de la política santafesina y la coyuntura nacional que encuentra a su líder como candidato a presidente.

-¿Esperaba ganar por una diferencia tan abultada?


-Esperábamos una buena elección. Ya Miguel había reelecto por el 56%. El record esta vez es la diferencia, pero esperábamos una buena elección. Estamos entusiasmados con el reconocimiento de la gente a la gestión, porque Lifschitz sacó 56 por ciento como senador porvincial.

-¿En algún momento de ese escrutinio a puro nervio, creyeron que Antonio Bonfatti perdía la gobernación ante Del Sel?


-No que perdíamos, porque esperábamos todas las mesas testigo y cuando nos llegaron estábamos 3 puntos arriba y cerca de 40, como esperábamos. Lo que nos asombro es como se había acercado Miguel del Sel. Pensábamos que la diferencia con el 2 era mayor, pero no que perdíamos. Sí nos pareció serio es esperar a festejar aunque teníamos las mesas testigo.

-¿Del Sel es un fenómeno popular o un catalizador de las frustraciones de la gente en una coyuntura particular?

-Es una suma de cuestiones. Primero es una persona popular vista de modo afectuoso, en segundo lugar representa un sector del peronismo importante, que incluye a su candidato a vice (Osvaldo) Salomón y los candidatos a diputados que sí vienen de la política, personas del peronismo de Santa Fe.

La construcción de Del Sel fue sumamente política. Fue un voto contra la alternativa de Rossi más algún otro voto que incluyó un llamado de atención a la política en general, que sintonizó con el mensaje de su campaña diciendo yo no confío a la política. También estuvo el que confío en Miguel como algo personalista.

Su elección nos interpela a los que hacemos política y creemos en los proyectos colectivos, en mejorar la relación política con la sociedad.

-¿Del Sel ocupó solo un lugar que dejó vacío el peronismo de Santa Fe al llevar al kirchnerista Agustín Rossi como candidato?

-Es una mezcla. El peronismo siempre tuvo una base y como digo, muchos de esos sectores trabajaron con Del Sel. Nuestro desafío era fuerte porque no llevábamos al candidato referente. Antonio Bonfatti y yo empezamos con bajo conocimiento. Existe ese voto que siempre estuvo unido al peronismo que estuvo con Del Sel y no con Rossi.

-¿Creen que Del Sel los puede ayudar, como prometió?


-A mí me parece que el diálogo político es una buena ayuda para la política. Poder dialogar sin creer que la política es sólo amigo y enemigo. Nosotros gobernamos Rosario con minorías en el Concejo y cuando la oposición asume un rol responsable, ayuda a resolver problemas.

Del Sel lo dice en términos personales, pero yo no entiendo así la política. Como él lo ve en términos personales lo plantea de otra manera.

La boleta única

-¿Están arrepentidos de implementar la boleta única, luego de perder todas las mayorías parlamentarias?

-Es una buena decisión la boleta única. Pero como dijo nuestro ministro de Justicia: tomamos un auto último modelo y fuimos por una carretera vieja. Porque tenemos una Constitución fuera de tiempo, que le da al que gana 28 de los 50 diputados. Una barbaridad. Hoy se utilizan esquemas proporcionales. Los santafesinos nos debemos una reforma constitucional. En Rosario ganamos el concejo pero quedamos con 11 concejales sobre 22. Y hay que definir la presidencia.

¿Y como se mueven en ese marco?

Tratamos de escuchar y sacar ordenanzas por alto acuerdo, porque eso representa una política de Estado para nosotros. Cuando mandamos un proyecto somos muy amplios para escuchar propuestas, sugerencias y modificar algunas cuestiones. Muchas veces votan en contra, pero en muchos casos pudimos acordar porque consideramos que la política no es quién tiene más votos.

Cuando decimos diálogo es diálogo en serio. La última ordenanza que sacó la ciudad para completar las redes cloacales la hicimos en acuerdo con todos los sectores políticos y la logramos por unanimidad. Y cuando votan en contra no vetamos.

-¿Porqué cree que perdió la lista de diputados provinciales del socialismo?

-En Rosario ganamos en las 5 categorías. En Diputados perdimos por el resto de la provincia. Indudablemente son algunos de los problemas que uno puede evaluar de la boleta única. María Eugenia Bilesa fue vicegobernadora de Sana Fe, un nombre conocido y un apellido conocido posiblemente haya ayudado en una boleta única. Nuestro candidato Raúl Lamberto es un legislador y no es lo mismo que un Ejecutivo.

También es cierto que Bielsa pudo reunir al peronismo como no pudo hacerlo Rossi y terminó con más votos que él y que Del Sel. Se sintieron más representados con ella. Pero me parece que no es un tema que ponga en duda la boleta única sino que es la Constitución de Santa Fe la que tiene que ser reformada.

-¿En esta nueva etapa esperan problemas para gobernar, al tener que convivir con las dos cámaras de la Legislatura en manos del peronismo?


-Es que en Santa Fe trabajamos de otra manera y a veces es difícil contarlo acá. Cuando hay un pedido de informes a un ministro, este va a informar a la comisión correspondiente. Nosotros no le tememos a que nos citen. En el gobierno de Reutemann y de Obeid jamás fue un ministro a la Legislatura. Rompimos el esquema de que ir a la Legislatura significa interpelación. Para nosotros es una invitación para un diálogo.

También es cierto que el kirchnerismo y el peronismo se pusieron de acuerdo y cuando planteamos una reforma tributaria para que paguen ingresos brutos las grandes empresas que estaban exentas, votaron en contra.

-¿Aún siendo una provincia próspera los complica tanto el reparto de fondos que hace el gobierno nacional?

-Nosotros hicimos una campaña basado en dos elementos. Primero en una defensa de la recuperación del Estado, que se había declarado incapaz de resolver los grandes temas. Por ejemplo habían declarado que no podían hacer obras públicas entonces crearon un programa para las hicieran las ONG. Nosotros recuperamos para el Estado esa función

Pero Santa Fe plantea además un espacio para el federalismo. Ni siquiera tuvimos una posición antagónica con la Nación. Afecta la institucionalidad que un gobierno concentre tantos recursos cuando las problemáticas están tan descentralizadas.

Nos planteamos cuáles son los criterios para repartir los recursos en vivienda, en energía, transporte para no darle a Santa Fe los recursos que le corresponden por la caja de jubilación, que paga el 82%, para tener una deuda de 8 mil millones de pesos.

Binner y el socialismo

-¿Fue acertado elegir a Bonfatti, una persona poco conocida, en una provincia que siempre votó figuras?

-Yo también empecé siendo poco conocida y gané. Pasa que nosotros a diferencia de muchos proyectos que tiene nombre de ismo entendemos que la renovación y diversidad de dirigentes enriquecen la política. Acá en la Capital se habla de macrismo y en la Nación de kirchnerismo

-¿No existe el binnerismo?

-No, hay un reconocimiento fuerte a la figura de Binner, pero existe el socialismo


-¿El frente con el radicalismo sigue firme en la provincia a pesar de que no van juntos a nivel presidencial?


-Sí, desde la práctica más que de la teoría. Yo con (el radical intendente electo de Santa Fe) Corra hablé al otro día de la elección. Y hay cientos de intendentes y presidentes comunales que hablamos. El frente funciona desde su propia lógica. Y hay una idea de que hay muchos socialistas en el gobierno de Binner, pero no es tan así. Binner construyó un gobierno que suma diversidad pero con mucho respeto a todas las fuerzas.

-¿Imaginan que el resultado de octubre puede implicar algún cambio para Santa Fe?


-Si gana Binner si (risas). Hay una lectura nacional que no mira la diversidad de las provincias. Los santafesinos discutieron Santa Fe y ahora van a discutir lo nacional. Pero hay una lógica local que no se pierde.

Rosario

-¿Qué le falta a Rosario?

-Rosario es una ciudad que se ha transformado profundamente. Es la ciudad del río, de la cultura, de la salud pública; es el espacio de la participación.

Lo que más le falta en este período es mejorar la infraestructura barrial. Tenemos una realidad que es la falta de redes cloacales y de pavimento. Y el tema vivienda: lograr superar los asentamientos. La ciudad hizo un plan muy bueno llamado Rosario hábitat, pero solos no podemos. La Municipalidad tiene una política social muy fuerte. Cualquier rosarino dice que primero le gustaría atenderse en un hospital público.

-¿Creció la pobreza en Rosario?


-Crecer no creció. Pero no se superó como debería superarse la pobreza del país después de ocho años de crecimiento. La pobreza no es sólo alimentos, sino el ejercicio de derechos, como vivienda y trabajo.

-¿Y cuánto debería reducirse en su mandato?


-Pobreza cero. Es el desafío. Pero no sólo se hace desde la ciudad sino con políticas macroeconómicas de un país. Una ciudad que puede hacer lo que ha hecho Rosario, que es tener la mejor salud pública para toda la población, que si te enfermas podes tener cero pesos y vas a tener el mejor sistema de salud. O tener 14 polideportivos. Pero hay condiciones macroeconómicas que llevan a la población a no tener sus necesidades cubiertas

-¿Se puede hacer una política de gobierno para los sectores medios?

-A diferencia de la provincia, que en su momento privatizó el Banco de Santa Fe, nosotros mantuvimos el Banco Municipal, que da créditos hipotecarios y para refacción. Pero a la demanda de más de 20 mil viviendas que tenemos el Municipio no puede responder. El problema es que no se han hecho viviendas en Rosario.

¿Fue porque Santa Fe creció menos que el país como dijo la presidenta?

-La presidenta tomó un indicador de 2008 y 2009 en el que Santa Fe creció menos por decisiones macroeconómicas. Pero Santa Fe tomó más y mejor empleo, es una provincia que paga el 82% móvil y está construyendo 8 hospitales y escuelas.

El crecimiento se mide por otras cuestiones y por ahí la Nación tendría que mirar más Santa Fe que lo que Santa Fe tiene que mirar a la Nación.