La guerra fría de Duhalde y De Narváez en el Conurbano

El ex presidente libra con el diputado una guerra sin cuartel distirito por distrito. Duhalde se encarga personalmente de sumar a dirigentes que trabajaron con De Narváez en el 2009 y que hoy no aceptan la alianza con el radical Alfonsín.  De todos modos, De Narváez se mantiene firme en Lomas de Zamora y Avellaneda.
Mientras acapara los títulos de los diarios por sus negociaciones con Ricardo Alfonsín, Francisco de Narváez libra una batalla estratégica por lo bajo con su ex aliado Eduardo Duhalde en la poderosa tercera sección electoral del Conurbano, que define el destinod e los candidatos a presidente y a gobernador.

De a poco, una parte de los dirigentes que lo acompañaron en las elecciones pasadas iniciaron un éxodo al duhaldismo que en algunos distritos dejó al empresario sin candidato a intendente. La tendencia se acentuó cuando se confirmó la alianza con Ricardo Alfonsín, algo muy difícil de digerir para algunos dirigentes peronistas. A continuación un repaso de la situación a hoy de esta pelea en los principales municipios de la tercera sección electoral.

Presidente Perón. Allí, de lo que fue el bloque Unión PRO sólo queda el duhaldismo. Dos de los tres concejales que accedieron a la bancada en 2009 por ese espacio (Juan Gissara y Andrea Jaime) están trabajando para el ex presidente y el otro, Andrés Capuano, mira con buenos ojos a Sergio Massa. De todos modos, lo más importante es que De Narváez perdió al diputado provincial Carlos Acuña y a su esposa, Blanca Cantero, que seguramente será la candidata a intendenta. La relación entre Acuña y De Narváez era óptima (el acto en el que el Colorado señaló que le iba a “romper el culo” al kirchnerismo se hizo en un club ligado al gremialista) pero cuando Duhalde le dio lugar a la vieja estructura sindical, el legislador provincial no lo pensó dos veces.

San Vicente.
Lo que era Unión PRO en el Concejo sólo existe en los papeles. A De Narváez sólo le quedó la concejala Graciela Costa y Duhalde, de la mano de Antonio Arcuri, acapara a los dirigentes que mejor miden en el peronismo federal para pelearle la intendencia a Daniel Di Sabatino. Por eso, desde el arcurismo ya mandaron a sondear a Luis Furiase, Marcelo Padró y Silvia Fernández, aunque algunos no descartan al edil y farmacéutico Osvaldo Zaninovich.

Esteban Echeverría. En esta tierra comandada por Fernando Gray, el denarvaísmo también perdió varios cuadros. Por el momento, mantiene al concejal Fernando Sousa (probable candidato a jefe comunal) y a dirigentes de menor rango como Gustavo Daudía y Rafael Echeverría. Sin embargo, el concejal Ramón Vallejo (un histórico del justicialismo) pasó a las filas de Graciela Camaño y el mismo camino tomó el ex edil Néstor Pulichino. El sector ya tiene candidato: Miguel Frigerio, ex secretario de Salud del groppismo. Además, no hay que olvidar al ex intendente Luis Obarrio que, si bien tiene influencia en el gobierno municipal a través de varios funcionarios, nunca renunció a su condición de duhaldista.

Lanús.
Luego de la revuelta de varios peronistas federales el año pasado por la decisión de Duhalde de intervenir el espacio y colocar conductores externos, las aguas parecen estar calmadas. Y en esa calma, el duhaldismo volvió a seducir a los cuadros que trabajaban con el fallecido Manuel Quindimil y que en 2009 trabajaron para el Colorado. Así hoy el duhaldismo tiene varios precandidatos: Daniel Gómez (el más instalado mediáticamente), “Pacha” Suárez, Jorge Coassini; Domingo Grimberg y Jorge Vacarezza. De Narváez, por su parte, mantiene en su fila a José Luis Bianchi y a los jóvenes concejales Gabriel di Massi y Cristian Bosio.

Lomas de Zamora.
Justamente en Lomas, el pago chico de Duhalde, De Narváez está más firme que en otros distritos. Allí el armado es comandado por Osvaldo Mércuri que será candidato a senador provincial mientras su hijo Gabriel le saca varios cuerpos de ventaja en su intento de ser candidato a intendente a Gustavo Ferri, yerno de Duhalde. Duhalde, mientras tanto, sigue dando pelea con el concejal Jorge Ferreyra y su par Eduardo Amalvy, que tiene aspiraciones de volver al Senado provincial.

Avellaneda.
En este municipio De Narváez tiene a uno de sus puntales políticos, como es la diputada provincial Mónica López y a su marido, el gremialista petrolero Alberto Roberti. De acuerdo a lo que pudo saber LPO, en el acuerdo con el radicalismo De Narváez puso un par de condiciones, entre ellas, que se respeten sus candidatos a intendente en Lomas y Avellaneda. En este último distrito, el duhaldismo alista a Saúl Ubaldini, hijo del histórico dirigente gremial del justicialismo.