Edesur: Ahora los vecinos de Berazategui cortaron la 9 de Julio
El grupo de vecinos de Berazategui que rechazan el encendido de una subestación eléctrica de Edesur cortó ambas manos de la avenida 9 de Julio por casi cinco horas. Dejaron un petitorio de audiencia en presidencia de la Nación.
Los vecinos autoconvocados de Berazategui que fueron reprimidos violentamente a principio de mayo, cortaron hoy la avenida 9 de Julio durante cinco horas. Rechazan la puesta en funcionamiento de la subestación Rigolleau que pertenece a la empresa Edesur.
Los manifestantes ocuparon dos carriles centrales de la avenida 9 de Julio y avenida de Mayo. Así lo habían anunciado previamente en un comunicado.
Piden que se traslade la subestación fuera del casco urbano de la ciudad para evitar contaminación. “Esta subestación va a producir 132 mil voltios y está ubicada en el centro de la ciudad”, explicó a La Política Online el dirigente de la CTA local Fernando Bovero.
El reclamo lleva seis años y se reanudó hace unos meses luego de la decisión de la empresa Edesur de avanzar con los trabajos.
Las primeras protestas comenzaron en 2005, primero contra la construcción, luego contra la habilitación y ahora contra la puesta en marcha de esta subestación en el predio de la empresa Rigolleau, en el corazón de Berazategui.
Como publicó LPO, a comienzos de mayo la policía desalojó violentamente a unos 40 integrantes de la “Asamblea por la Vida” que acampaban en los alrededores de la subestación. La represión dejó varios heridos, entre ellos una mujer que resultó con una fractura de brazo y un adolescente que sufrió la fractura de una pierna, pero ni la Provincia, ni el Municipio se hicieron cargo de la orden de desalojo y cargan las culpas contra la Justicia.
Además, médicos del hospital Evita Pueblo denunciaron presiones para que los lastimados en la refriega no sean registrados y no se les entreguen certificados médicos.
Los vecinos aseguran que hoy la zona está militarizada con unos 300 policías. Según dicen, fueron contratados por la empresa Edesur y cobran a través de horas cores.
Además aseguran que ofrecieron poner a disposición sus propios equipos técnicos para verificar la posible contaminación, pero la propuesta fue rechazada por la municipalidad.
Los vecinos llevaron un reclamo con cuatro puntos centrales: El traslado de la Subestación Rigolleau a una zona no poblada, el desprocesamiento de la vecina detenida, la desmilitarización del barrio, y el rechazo a la represión y a la protesta social.
Los manifestantes ocuparon dos carriles centrales de la avenida 9 de Julio y avenida de Mayo. Así lo habían anunciado previamente en un comunicado.
Piden que se traslade la subestación fuera del casco urbano de la ciudad para evitar contaminación. “Esta subestación va a producir 132 mil voltios y está ubicada en el centro de la ciudad”, explicó a La Política Online el dirigente de la CTA local Fernando Bovero.
El reclamo lleva seis años y se reanudó hace unos meses luego de la decisión de la empresa Edesur de avanzar con los trabajos.
Las primeras protestas comenzaron en 2005, primero contra la construcción, luego contra la habilitación y ahora contra la puesta en marcha de esta subestación en el predio de la empresa Rigolleau, en el corazón de Berazategui.
Como publicó LPO, a comienzos de mayo la policía desalojó violentamente a unos 40 integrantes de la “Asamblea por la Vida” que acampaban en los alrededores de la subestación. La represión dejó varios heridos, entre ellos una mujer que resultó con una fractura de brazo y un adolescente que sufrió la fractura de una pierna, pero ni la Provincia, ni el Municipio se hicieron cargo de la orden de desalojo y cargan las culpas contra la Justicia.
Además, médicos del hospital Evita Pueblo denunciaron presiones para que los lastimados en la refriega no sean registrados y no se les entreguen certificados médicos.
Los vecinos aseguran que hoy la zona está militarizada con unos 300 policías. Según dicen, fueron contratados por la empresa Edesur y cobran a través de horas cores.
Además aseguran que ofrecieron poner a disposición sus propios equipos técnicos para verificar la posible contaminación, pero la propuesta fue rechazada por la municipalidad.
Los vecinos llevaron un reclamo con cuatro puntos centrales: El traslado de la Subestación Rigolleau a una zona no poblada, el desprocesamiento de la vecina detenida, la desmilitarización del barrio, y el rechazo a la represión y a la protesta social.