La Cámpora desembarca en La Plata y enfrenta a Bruera con el hijo de Carlotto
Andrés Larroque se sumó al círculo íntimo del kirchnerismo que llegó a La Plata para apoyar al candidato del kirchnerismo, Guido Carlotto, en un acto en que llovieron las críticas al intendente Pablo Bruera. Mientras tanto, Randazzo intenta traccionar con candidato propio.
Importantes nombres del entramado kirchnerista llegaron a La Plata para brindar su apoyo a la candidatura a intendente de Guido Carlotto, el hijo de Estela, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo.
Estuvieron el apoderado del Frente para la Victoria, Carlos “Cuto” Moreno, el diputado Carlos Kunkel; el ministro de Justicia, Julio Alak; el ex canciller, Jorge Taiana; y hasta el secretario General de La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque.
La cena, significó un fuerte respaldo a la candidatura de Carlotto -por el momento el único candidato lanzado oficialmente para llegar a la intendencia- pero también hubo fuertes críticas al jefe comunal, Pablo Bruera, por sus intenciones de retornar al kirchnerismo y llevar a Cristina como candidata a presidenta.
La embestida más fuerte llegó de “Cuto” Moreno. “En 2009 yo vivía en City Bell (La Plata) y nunca recibí la boleta completa del Frente para la Victoria, pero sí recibí unas 16 veces la boleta cortada del Frente Renovador Platense”, dijo el apoderado del Frente para la Victoria recordando la estrategia que por entonces impulsó el intendente platense y que le costó una ruptura de relaciones con la Casa Rosada.
“Muchos dijeron que estábamos pobres y hasta hablaron de final de época. Entonces no entiendo ahora el enamoramiento que tienen con Cristina”, agregó.
Hubo satisfacción en las filas K por las palabras de Moreno. Es que esa embestida contra Bruera, más el fuerte apoyo de primeras líneas nacionales pareciera alejar a la Rosada de jefe comunal platense, quien por estos días busca una especie de perdón a través de reuniones que mantiene con Juan Carlos Mazzón, uno de los operadores electorales de Cristina.
La reafirmación del candidato y los cruces a Bruera fueron los ejes centrales más tarde durante los discursos que los invitados pronunciaron durante la cena.
Números que cierran
En el armado de Carlotto se entusiasman con las últimas encuestas. Aseguran que el candidato mide unos 14 puntos y que Bruera rondaría unos 28, un puntaje por lo bajo a lo que obtuvo en la elección de 2009.
Las chances del hijo de Estela pueden crecer en función de que su nivel de conocimiento es de unos 50 por ciento mientras que –según sus sondeos- el nivel de conocimiento de Bruera llega a un 92 por ciento.
En base a esto, desde el frente kirchnerista sostienen que Carlotto tiene mucho margen por crecer en la opinión pública de la gente, mientras que el intendente actual estaría llegando a su techo.
De acuerdo a este sondeo realizado en La Plata, la Presidenta mide unos 42 puntos, lo que implicaría un escenario muy diferente al de 2009 cuando Néstor Kirchner tenía números desfavorables. En tanto, para el lugar de gobernador, Francisco De Narváez estaría por encima de Daniel Scioli.
Dentro del kirchnerismo atribuyen este último aspecto a que el diputado hizo un buen trabajo en la capital provincial, recorriendo diferentes puntos del distrito.
Durante el encuentro, Carlotto también recibió el apoyo de la Corriente Nacional de la Militancia. Por este espacio estuvo el director de Educación bonaerense, Mario Oporto; Gustavo Di Marzio, del Movimiento Evita; el diputado nacional por Mendoza, Jorge “Pampa” Alvaro; y el diputado nacional por La Plata, Ariel Pasini.
Rebeldes
Pero no todo el oficialismo se encolumnó aún detrás de Carlotto. Anoche, mientras las primeras líneas del kirchnerismo cenaban en la capital provincial, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, dio la orden a su referente platense Guillermo Justo Cháves, de salir a reafirmar su candidatura a intendente de la ciudad.
“Si Carlotto mide más que yo, por supuesto que estaría dispuesto a acompañarlo”, dijo hoy Cháves.
Hay un dato que llama la atención de muchos: La estrategia de Randazzo es funcional a Bruera y no al gobierno nacional. Polariza el kirchnerismo y en la revuelta el fortalecido es el actual intendente.
Otro estuvo ausente anoche fue el vice ministro de Desarrollo Social de la Nación, Carlos Castagneto. Lejos de los barrios y abocado a su labor al lado de Alicia Kirchner, Castagneto busca traccionar para que su mujer, Ana Herrán ocupe un lugar en la lista de senadores provinciales.
Estuvieron el apoderado del Frente para la Victoria, Carlos “Cuto” Moreno, el diputado Carlos Kunkel; el ministro de Justicia, Julio Alak; el ex canciller, Jorge Taiana; y hasta el secretario General de La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque.
La cena, significó un fuerte respaldo a la candidatura de Carlotto -por el momento el único candidato lanzado oficialmente para llegar a la intendencia- pero también hubo fuertes críticas al jefe comunal, Pablo Bruera, por sus intenciones de retornar al kirchnerismo y llevar a Cristina como candidata a presidenta.
La embestida más fuerte llegó de “Cuto” Moreno. “En 2009 yo vivía en City Bell (La Plata) y nunca recibí la boleta completa del Frente para la Victoria, pero sí recibí unas 16 veces la boleta cortada del Frente Renovador Platense”, dijo el apoderado del Frente para la Victoria recordando la estrategia que por entonces impulsó el intendente platense y que le costó una ruptura de relaciones con la Casa Rosada.
“Muchos dijeron que estábamos pobres y hasta hablaron de final de época. Entonces no entiendo ahora el enamoramiento que tienen con Cristina”, agregó.
Hubo satisfacción en las filas K por las palabras de Moreno. Es que esa embestida contra Bruera, más el fuerte apoyo de primeras líneas nacionales pareciera alejar a la Rosada de jefe comunal platense, quien por estos días busca una especie de perdón a través de reuniones que mantiene con Juan Carlos Mazzón, uno de los operadores electorales de Cristina.
La reafirmación del candidato y los cruces a Bruera fueron los ejes centrales más tarde durante los discursos que los invitados pronunciaron durante la cena.
Números que cierran
En el armado de Carlotto se entusiasman con las últimas encuestas. Aseguran que el candidato mide unos 14 puntos y que Bruera rondaría unos 28, un puntaje por lo bajo a lo que obtuvo en la elección de 2009.
Las chances del hijo de Estela pueden crecer en función de que su nivel de conocimiento es de unos 50 por ciento mientras que –según sus sondeos- el nivel de conocimiento de Bruera llega a un 92 por ciento.
En base a esto, desde el frente kirchnerista sostienen que Carlotto tiene mucho margen por crecer en la opinión pública de la gente, mientras que el intendente actual estaría llegando a su techo.
De acuerdo a este sondeo realizado en La Plata, la Presidenta mide unos 42 puntos, lo que implicaría un escenario muy diferente al de 2009 cuando Néstor Kirchner tenía números desfavorables. En tanto, para el lugar de gobernador, Francisco De Narváez estaría por encima de Daniel Scioli.
Dentro del kirchnerismo atribuyen este último aspecto a que el diputado hizo un buen trabajo en la capital provincial, recorriendo diferentes puntos del distrito.
Durante el encuentro, Carlotto también recibió el apoyo de la Corriente Nacional de la Militancia. Por este espacio estuvo el director de Educación bonaerense, Mario Oporto; Gustavo Di Marzio, del Movimiento Evita; el diputado nacional por Mendoza, Jorge “Pampa” Alvaro; y el diputado nacional por La Plata, Ariel Pasini.
Rebeldes
Pero no todo el oficialismo se encolumnó aún detrás de Carlotto. Anoche, mientras las primeras líneas del kirchnerismo cenaban en la capital provincial, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, dio la orden a su referente platense Guillermo Justo Cháves, de salir a reafirmar su candidatura a intendente de la ciudad.
“Si Carlotto mide más que yo, por supuesto que estaría dispuesto a acompañarlo”, dijo hoy Cháves.
Hay un dato que llama la atención de muchos: La estrategia de Randazzo es funcional a Bruera y no al gobierno nacional. Polariza el kirchnerismo y en la revuelta el fortalecido es el actual intendente.
Otro estuvo ausente anoche fue el vice ministro de Desarrollo Social de la Nación, Carlos Castagneto. Lejos de los barrios y abocado a su labor al lado de Alicia Kirchner, Castagneto busca traccionar para que su mujer, Ana Herrán ocupe un lugar en la lista de senadores provinciales.