Boldt hizo una oferta por la planta de Ciccone

La firma Boldt, dueña del casino Trilenium de Tigre entre otros establecimientos informó hoy a La Bolsa de Buenos Aires que presentó una oferta al juzgado en lo Comercial N° 8, a cargo de Javier Cosentino, para alquilar la planta modelo de Ciccone Calcográfica.
Este juzgado es el que entiende en la quiebra de esta firma, especializada en la confección de papel moneda y otros papeles de seguridad. La quiebra de Ciccone fue impulsada por la AFIP que le reclamó una deuda impositiva de $239 millones. Se trata de una compañía en la que trabajan 300 personas y es muy poco usual que la AFIP lleve a la quiebra a una empresa de esa envergadura.

Como sea, hoy en su presentación a La Bolsa, Boldt detalló que ofreció al juzgado hacerse cargo de inmediato de los sueldos del personal y como muestra de la seriedad de su propuesta entregó un cheque certificado de 400 mil pesos.

Inicialmente la AFIP había dejado trascender su intención de quedarse con la planta. Una idea un tanto descabellada ya que ese organismo en principio no tendría mayores tareas para realizar. Luego, desde el Gobierno se dejó trascender una idea más racional: la propia Casa de la Moneda podría quedarse con la operación de la fábrica.

El juez deberá ahora resolver si avanza con la estatización de la planta o el alquiler propuesto por Boldt. En principio la firma de Tabanelli se compromete a operarla por un plazo mínimo de un año. Por ahora no hay propuestas de compra porque se desconoce la real situación de la compañía y sus pasivos.

Los trabajadores, enrolados en el gremio de los gráficos que lidera el histórico Raimundo Ongaro, preferirían la opción del alquiler a Boldt. Es que temen seguir el destino lamentable de la ex papelera Massuh que naufragó en el managment voluntarista de Guillermo Moreno. Además, no les hace ninguna gracia pasara a ser trabajadores estatales.

La aparición de Boldt no es casual. De hecho, sacando a la quebrada Ciccone es la empresa del país con más experiencia en la fabricación de papeles de seguridad. La firma de Tabanelli hace desde cheques hasta gráficas de seguridad, por ejemplo.

La planta de Ciccone es de punta en la materia y confeccionó durante 14 años los documentos de identidad y pasaportes –hasta que entró en conflicto con Aníbal Fernández- y se había hecho cargo de la impresión de los patacones bonaerenses, entre otros títulos públicos. Fue así que asesorados por el especialista en quiebras Héctor Alegría, los directivos de Boldt hicieron su propuesta de alquiler.

Lo curioso es que por algún motivo, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, parece interesado en llevar a la planta para las manos de La Casa de la Moneda, aunque en definitiva se trata de una decisión que tomará el juez de la quiebra en consulta con el síndico.