Matrimonio gay: los bloques votan divididos y Kirchner va a cantar victoria

Todas las fuerzas de Diputados dieron vía libre y votarán divididas. Pero habría muchas abstenciones, que facilitarían una aprobación con mayoría simple. Sobre todo en el oficialismo, donde muchos de los que no están de acuerdo evitarían oponerse para permitirle un triunfo a Néstor Kirchner, quien pisará el recinto por primera vez en una sesión ordinaria. Carrió se va del recinto y Solá vota a favor. Intensas gestiones de la evangelista Cyntia Hotton, busca votos por la negativa.
En un recinto donde la paridad trabó el tratamiento de la mayoría de los temas, el proyecto para aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo romperá esa lógica y el miércoles dividirá a la mayoría de los bloques, que hasta ahora se comportaron de forma homogénea, a favor o en contra del Gobierno.

Néstor Kirchner, destinatario de la mayoría de los amores y odios del recinto, aprovechará la dispersión para participar por primera vez en su vida de una sesión ordinaria con la idea de votar a favor y, como cada vez que apuesta a algo, ganar.

Aunque el jefe del bloque kirchnerista, Agustín Rossi, dictó libertad de conciencia, la presencia del ex presidente podría torcer la balanza, ya que con él en el recinto muchos de sus compañeros que se oponen preferirán abstenerse, facilitando la aprobación por mayoría simple, lo que requiere la mitad más uno de los presentes. 

“Tenemos la mitad a favor, y del resto sólo la mitad votaría en contra”, especuló uno de los puntales de la bancada FpV-PJ, que suma 86 de las 257 bancas de la Cámara.

Los más entusiastas en aprobar el proyecto dicen haber contado entre 120 y 130 votos, justo el número necesario para garantizar la mayoría. Los detractores, con la evangelista Cynthia Hotton a la cabeza, hablan de 113.

Entre los FpV-PJ quienes seguro se oponen son Jorge Landau, Graciela Gianettassio y José María Díaz Bancalari. El primero firmó un dictamen en contra en la comisión de Legislación General, que sólo reconoce la unión civil entre personas del mismo sexo, y fue avalado por los otros dos. Patricia Fadel también firmó un despacho en minoría en rechazo al proyecto original.

Juliana Di Tullio encabeza la lista de los K que apoyan la iniciativa, que sólo tendría aval unánime entre los 6 socialistas, los 5 del Gen, los tres del Frente Cívico y Social, los once del interbloque de centroizquierda y los 5 de Nuevo Encuentro, con Vilma Ibarra como una de las máximas defensoras.

Unir a una propuesta oficial a este lote de legisladores identificados con el progresismo es uno de los principales objetivos de Kirchner para este año parlamentario. Recién el miércoles lo logrará por primera vez.

Entre los 11 Pro Laura Alonso daría el sí. Y entre los 44 de la UCR habrá una total dispersión: según los últimos cálculos, con mayoría por la negativa, comenzando con las dos máximas autoridades de la bancada: Oscar Aguad (jefe) y Rubén Lanceta.

Las radicales Silvana Giúdice, Silvia Storni y María Luisa Storani militan por la aprobación, al igual que Marcela Rodríguez, de la Coalición Cívica. Juan Pedro Tunessi y Daniel Katz, uno de cada línea interna de la UCR (alfonsinista y cobista, respectivamente), irán por el si.

Elisa Carrió esquivará el problema de ser católica militante y contar con perfiles progresistas entres los suyos y se retirará del recinto. Entre los otros 18 de su bloque, hasta ahora, sólo se opondrían Alfonso Prat Gay Alicia Terada.

En el bloque Peronismo Federal sólo se conoce la aceptación del titular, Felipe Solá, que sería acompañado por la santafecina Cecilia Arena. El resto estaría más cerca de la negativa, aunque, a diferencia de la mayoría de los bloques, aceptarán tirar las cartas sobre la mesa en una reunión y, si es posible, acercar posiciones.

Hotton, la militante del no

La porteña Cynthia Hotton, del monobloque Valores Para mi País, es la principal militante por el rechazo al matrimonio entre personas del mismo sexo.

Y según confiaron a LPO diputados que la vieron peregrinar por los pasillos, su argumento para buscar votos es que el proyecto contempla además la posibilidad de que las parejas homosexuales puedan adoptar hijos.

En realidad, ese tema no forma parte del texto porque ya está contemplado en el Código Civil, donde no se exigen condiciones de heterosexualidad para las adopciones, sino que sólo se permite ese trámite a los cónyuges o a particulares, cuya vida sexual, en definitiva, se desconoce.

Los defensores del proyecto dicen que el arma de Hotton no sería inocente: los sondeos que circularon por el Congreso indican que un alto porcentaje de la población concuerda con el matrimonio gay pero un número mucho menor acepta que esas parejas puedan adoptar hijos.

Con ese dato, muchas organizaciones de gays y lesbianas prefirieron no hacer referencia al tema adopción en el proyecto, pero Hotton, arribada en 2007 por el Pro pero convertida al cobismo, lo estaría poniendo sobre la mesa. Será cuestión de contar.

La duda es final es si el proyecto pasará el filtro del Senado, necesario para que sea ley. Allí conviven tres representantes de cada provincia, muchas de ellas de fuertes costumbres conservadores. Una pelea que se avecina.