Cristina irrumpió en Malvinas para acotar el juego de Cariglino con Duhalde

La Presidenta hizo una visita relámpago al municipio de Malvinas Argentinas para no "regalarle" al intendente Jesús Cariglino, la inauguración de viviendas financiadas por la Nación. Es que este jefe comunal ya no oculta sus relaciones con Eduardo Duhalde. Los intendentes aliados y las opciones para el 2011.
El intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, le puso el pecho hoy al desembarco de Cristina Kirchner en su distrito para inaugurar 230 viviendas, financiadas por la Nación. Fue notable la ausencia de referencias de la Presidenta hacia el jefe comunal en su discurso y la frialdad que le dispensó detrás del escenario.

Es que en la Casa Rosada ya tienen confirmados los avanzados acuerdos políticos que Cariglino está trabajando con Eduardo Duhalde para el 2011. Se trata del armado de una red territorial que eventualmente se pondrá a disposición del candidato a gobernador que mejor acuerdo con el ex presidente.

Hoy la hipótesis más probable es Sergio Massa; pero no se descarta que cuando se acerquen las elecciones Duhalde logre recomponer su relación con Francisco de Narváez, o incluso que apoye una reelección de Daniel Scioli si este rompe con el kirchnerismo. Falta mucho.

Pero lo cierto es que este curioso intendente -que en el 2003 pasó dos semanas detenido acusado de más de veinte delitos y que ahora circula libremente gracias al pago de una caución-, ya antes de las elecciones del 28 de junio mostró su doble juego.

Primero se negó a encabezar una lista testimonial y cuando las presiones eran insoportables las cortó con un simple: “yo no soy kirchnerista”. Pero luego, a la hora de armar las listas ubicó a su hermano Roque Cariglino como senador provincial por la boleta del Frente para la Victoria. Y acordó con De Narváez que llevara como candidato al hoy senador electo Jorge D´Onofrio. El negocio le salió redondo y hoy tiene dos senadores.

El armado de Cariglino

Sin embargo, el despliegue territorial de Cariglino que maneja su municipio desde su creación en 1995 y que nunca cortó lazos con Duhalde, se extiende a otros distritos. En particular mantiene sólidas relaciones políticas con sus pares de San Miguel, Joaquín de la Torre; de Hurlingham, Luis Acuña; y de Escobar, Sandro Guzmán. Todos jefes comunales en franco tránsito al duhaldismo.

De hecho, el la Casa Rosada no se tomó como una casualidad que Acuña y De la Torre hayan asistido a la ceremonia de inauguración, un gesto poco usual, salvo que se haya querido enviar un mensaje muy directo a la Presidente.

Nada de esto escapa a la Casa Rosada, que también tiene un minucioso registro de las opiniones de los concejales de Cariglino, que en el recinto suelen extenderse en largos cuestionamientos contra el gobierno nacional.

La forzada irrupción de la Presidenta en la inauguración de hoy revela la debilidad profunda que está sufriendo el kirchnerismo, que día a día observa con horror lo escurridizos que son los intendentes del Conurbano, su supuesto último refugio en el entramado peronista.

Así tienen que soportar que permanentemente los intendentes le exijan más fondos para obras, para planes de cooperativas, mientras que a la hora de visitar los distritos se llevan una sorpresa desagradable como la que hoy recibió Cristina. Junto a las obras de asfalto y de entubamiento del arroyo Darragueira –financiadas por el Ministerio de Planificación-, el único cartel visible es uno que exhibe la sonrisa del jefe comunal, junto al slogan : “Gracias intendente Cariglino” ¿La Presidenta? Bien, gracias.