Arlía: “los sueldos de la Provincia no están en duda”

El ministro de Economía bonaerense, Alejandro Arlía, declaró en exclusiva a LPO que el gobierno de Daniel Scioli podrá pagar los sueldos del último trimestre, pese a las versiones periodísticas que afirman lo contrario y que cuenta con el apoyo del Gobierno nacional. Además anticipó que podrían salir bonos para el mercado interno.
El ministro de Economía bonaerense Alejandro Arlía, declaró a La Política Online que “los salarios de la Provincia no están en duda” y que el Ejecutivo que encabeza Daniel Scioli no está “en una cuenta regresiva”.

Este medio explicó el viernes pasado las complicaciones financieras que tiene el gobierno de la provincia de Buenos Aires para encarar el último trimestre, tiempo en el que trascendió que estarían en duda los salarios de la maquinaria gigante que representa la administración pública bonaerense.

“Desde el Gobierno reconocemos que hay ciertas necesidades financieras que cubrir y para eso estamos trabajando fuertemente, pero bajo ningún punto de vista vamos a dejar de cumplir con nuestras responsabilidades en materia salarial”, explicó el ministro y adelantó que las prioridades de la provincia son el pago de los salarios, la prestación de los servicios sociales y la continuidad de la obra pública.

Arlía, que además preside el PJ de la localidad de Brandsen, indicó a La Política Online que “poner en duda los salarios del último trimestre no es una chicana nueva, ya lo hicieron en abril y mayo con respecto a la vuelta de los patacones; y después con el sueldo de junio y el aguinaldo”, en referencia a las declaraciones que hizo al sitio La Tecla el ex ministro de Economía durante el felipismo, Jorge Sarghini.

Sarghini había dicho que el gobierno de Scioli tiene una necesidad de financiamiento no cubierta que oscila entre los 2500 y 3000 millones de pesos, lo que pone en duda los salarios del último trimestre.

Arlía le respondió a través de La Política Online que “el gobierno se ocupa día a día en conseguir el financiamiento que necesita” y que “nunca trabajamos con una sola ventanilla, es decir, contamos con el apoyo nacional, incluso con asistencia financiera que ya está contemplada en su presupuesto; pero también buscamos otros mecanismos de financiamiento”.

“El mercado local tiene liquidez para tomar los bonos que emite la Provincia, de modo que otra opción que manejamos es esa: la de colocar nuevos bonos en el mercado interno”, anticipó el ministro.

Arlía subrayó además que la provincia “tiene su foto” en mantener la recaudación y que desde el Ejecutivo encuentran una gran voluntad de los contribuyentes en cumplir con los pagos, “por eso el crecimiento de la recaudación se mantiene; con eso estimamos que vamos a llegar a cumplir las metras presupuestadas”, sostuvo.

El piso de los municipios

Este medio también explico que los intendentes de la UCR pedirían en la próxima ronda de diálogo político iniciada por Scioli, que se establezca un piso de coparticipación que les garantice la liquidez necesaria para poder pagar los sueldos en sus distritos.

Con respecto a ese tema, Arlía explicó que en los años 2000 y 2001, cada vez que se trató de garantizar la Coparticipación se terminó incumpliendo, y está a la vista que hoy no tenemos las mismas características financieras que marcaron ese período.

“Las garantías se ponen cuando no se puede cumplir con lo pautado, y nosotros estamos trabajando para alcanzar las metas que nos propusimos”, indicó el ministro y afirmó que “la política del gobernador Scioli es atender las necesidades de los municipios, y desde el ministerio de Economía los asistimos tanto en materia de adelantos de Coparticipación; entregando periódicamente el Fondo Sojero; con Aportes del Tesoro Provincial (ATP); y con Aportes del Tesoro Nacional (ATN)”.

Por último, Arlía detalló que de esa forma la Provincia asistió en lo que va del año a 97 municipios, lo que significó unos 70 millones de pesos. En cuanto a los números de Coparticipación provincial, el funcionario señaló que se giró a los municipios un 26 por ciento más que en 2008.