Cómo es el nuevo plan para comprar autos 0 Km baratos

El Gobierno eliminó algunas restricciones y ahora se podrán comprar modelos medianos y acceder án quienes ya tienen un vehículo 0 Km. Guillermo Dietrich explicó cómo es el nuevo plan de créditos y se entusiasmó. "Si hay confianza, se venderán 500.000 unidades en el año", sostuvo.
El Gobierno eliminó restricciones al plan para comprar autos baratos. Ahora se podrá acceder a 0 Km medianos y no s´lo a los pequeños y no es necesario certificar que no posee otro vehículo.

La intención oficial es incrementar en no menos de 50.000 unidades el cupo original de 100.000 que se financiarán con fondos de la Anses. Pero, según Guillermo Dietrich, el presidente de una de las concesionarias más grandes del país, podría llegar a venderse hasta 500.000 vehículos en este año. "Si políticamente no hay agresión verbal y la economía es bien llevada y criteriosa, la gente no se asusta y sale a comprar", sostuvo hoy en diálogo con el programa Puro Periodismo en radio El Mundo.

El sistema de venta será similar al plan de ahorro previo conocido como "plan Moreno". Se deberá pagar un anticipo del 30%  y la Anses financiará el resto. "Antes era un plan de 60 cuotas para dos modelos de cada marca y el cliente podía migrar y tener aire acondicionado o dirección asistida si pagaba la diferencia -explicó Dietrich- pero ahora el Gobierno amplió la gama de vehículos a todos los modelos medianos producidos dentro del Mercosur". Quedaron afuera los que valen más de 45.000 dólares. Además, se eliminó la claúsula que le impedía acceder al crédito a quienes ya tenían un 0Km.

Se sigue manteniendo el pago de las primeras 12 cuotas al contado para entregar el auto. La tasa del plan prendario -aquél que administran los bancos- es de hasta el 16%, pero el "plan Moreno" es de 60 cuotas fijas sin interés. "La cuota se ajusta al valor del auto. Si en un futuro aumenta el precio del auto, sube la cuota y si disminuye, baja", detalló. O sea que podrían superar los $2.000 si se financia el valor total de los modelos más caros.

Para calificar, una familia deberá reunir ingresos por más de $10 mil.

Según el diario Crítica de la Argentina, la flexibilización del programa se decidió en los últimos días, a pedido de automotrices y concesionarios y ante el desbarranque mundial del sector. El Gobierno frenó por ahora las cesantías en las grandes compañías, pero tomó nota de que miles de autopartistas ya prepararon telegramas de despido para sus operarios y algunos empezaron a enviarlos. No quieren que se multipliquen casos como el de Paraná Metal, en Villa Constitución, ni el de la fábrica de butacas Pabsa, que ya se deshizo de un centenar de obreros en Tigre en lo que va del año.

El presidente de la Asociación de Concesionarios (ACARA), Dante Álvarez, todavía es optimista. “Ya hubo unos 20 mil pedidos, pero esto se va a agilizar mucho a partir de ahora. Y marzo va a ser un mes de muchas entregas”, dijo a este diario el ejecutivo, tras el anuncio del nuevo paquete de incentivos en la quinta presidencial. “En mi agencia hubo que rechazar un 25% de los encargos porque era gente que no entraba y ahora va a entrar”, celebró.

La ministra Débora Giorgi había recibido la semana pasada a los popes de las automotrices, nucleadas en ADEFA. Ayer, el secretario de Industria, Fernando Fraguío, fingió dureza y exhortó a los empresarios a “defender a los trabajadores”. Hasta que asumió Cristina, él mismo presidió ADEFA en representación de IVECO, la fábrica de camiones del grupo Fiat que la semana pasada anunció el despido de 170 contratados a partir de marzo.

Para lanzar esta ampliación del plan, al cupo de 3.000 millones de pesos para financiar autos, ahora la Anses agregó otros $650 millones para otorgar créditos a la venta de pick ups, utilitarios y camiones. Y, con esto suma más fondos jubilatorios que Amado Boudou y Sergio Chodos, derivan sin control desde la Administración de Seguridad Social. Hasta el momento, ambos funcionarios kirchneristas repartieron alrededor de 31.000 millones de pesos.