Caputo, el ganador de la lucha por la “Little Manhattan” de Puerto Madero

Por una ordenanza de Grosso el Dique 1 es el único lugar del barrio donde se pueden construir torres de 70 metros. Allí se vivió una lucha de poderes entre el Grupo Brito, el devidista Fernández Prieto y el grupo Farallon-G&D. Los tres se quedaron con parceles, pero finalmente, será el constructor macrista el que realice una obra de 275,3 millones.
Allá por 2007, se desató una endiablada lucha de poderes entre los principales constructores de la ciudad para quedarse con la última joya porteña: el Dique 1, el único lugar del nuevo barrio de Puerto Madero donde, por una ordenanza del ex intendente Carlos Grosso, se pueden construir torres de 70 metros. El triunfador, final y lógicamente, no fue otro que Nicolás Caputo.

Aunque el proyecto Zencity lo impulsa la desarrolladora inmobiliaria Vizora, del grupo Macro –propiedad del kirchnerista Jorge Brito- asociado con el joven y exitoso constructor Rodrigo Fernández Prieto –con el aval de Julio De Vido-, con una inversión total de 150 millones de dólares, será la Caputo Construcciones la verdadera beneficiaria del plan.

Según trascendió, obtuvo un contrato para levantar cinco edificios en el Dique 1 de Puerto Madero, asociada con la firma Edimtar. El monto total del contrato asciende a $275,3 millones y el plazo de ejecución de la obra, que incluye tres torres de oficinas y dos de viviendas, es de 36 meses. Los cinco edificios formarán parte del complejo Zencity, el plan de Brito que ya muchos conocen como la “Little Manhattan” de Puerto Madero –ver detalles del proyecto en “Zencity, el mega proyecto de Brito y Fernández Prieto para el Dique 1”-.

Zencity, +5411 y Madero Harbour son los extravagantes nombres que ilustran a los más extravagantes proyectos que fueron aprobados por el Gobierno de la Ciudad durante la gestión de Jorge Telerman y que ya se están comercializando. Todos esos proyectos cuentan con la edificación de torres de hasta 70 metros, cuando en el resto de los diques del barrio, la construcción máxima permitida es de 29,5 metros. Todo permitido por el cuestionado ex intendente menemista –ver “Nace la “Little Manhattan” de Puerto Madero”-.

El dueño de todo el terreno del dique era Alejandro Ginevra, de la desarrolladora Newside, quien en el 2006 decidió parcelarlo y vender varias porciones del mismo, entre otros a la gente del Zencity y el Grupo Farallon, del +5411. Así, quien había quedado afuera del negocio era Caputo, por ese entonces con un perfil muy bajo por estar Mauricio Macri en plena campaña electoral.

Pero la jugada fue tan medida como exitosa. Sin la necesidad de adquirir terrenos y ganarse primeras planas durante el proselitismo de PRO, Caputo se quedó con lo mejor del negocio: la construcción.

Puja interminable

La lucha por quedarse con el Dique 1 fue inagotable. El tema llegó hasta la Oficina de Planeamiento Urbano, quien le pidió un dictamen al entonces procurador de la Ciudad, Agustín Zbar, para que informara cuál era la normativa que debía tenerse en cuenta para cotizar la zona. El Procurador respaldó la posición de Farallon y dijo que una disposición administrativa de ninguna manera podía derogar una Ley de la Legislatura. La batalla la había ganado Farallon.

A partir de ahí, en octubre fue aprobado el Proyecto +5411 con las torres de la polémica, y un mes más tarde también aprobaron el Proyecto Madero Harbour, de Newside, que adaptándose a la nueva realidad, también tendrá torres altas.

Lo que también es cierto, es que es creciente la cantidad de torres que se están construyendo en Puerto Madero, al tiempo que aún son muchas las parcelas dentro del Dique 1 que todavía no tienen planes concretos.