En plena tensión con China, el Departamento de Estado impulsa la venta de 24 aviones militares a la Argentina
La operación excede largamente el hecho de la posible venta de 24 aviones militares. La compra de los F-16 encerraría un mensaje estratégico por parte de la Argentina. Un guiño de afinidad hacia los Estados Unidos, en un contexto de tensión creciente con China. La carrera entre ambas potencias se despliega también en el tablero de Latinoamérica. "Es una oportunidad para que ambos países enfrenten amenazas juntos", planteó la Subsecretaria Adjunta de Seguridad Regional del Departamento de Estado, Mira Resnick.
"Además esto construye relaciones", agregó la funcionaria estadounidense en una charla con LPO y un grupo de periodistas. Resnick estuvo meses atrás en Buenos Aires. En aquella visita se reunió con el ministro de Defensa argentino Jorge Taiana. Fue una muestra de la importancia política que Estados Unidos le da a la transacción de los aviones de guerra.
En el encuentro con la prensa, la funcionaria de la administración de Joe Biden confirmó que EE.UU. aprobó definitivamente el trato. El gobierno autorizó la venta de 24 aviones caza de la década del ochenta pero modernizados. Los F16 están en manos del gobierno de Dinamarca, pero la transacción requería el aval estadounidense. La compra incluiría un sistema de misiles, capacitación y mantenimiento. Resnick a su vez le hizo un guiño a la Argentina, ante la sequía de dólares que desangra al gobierno peronista. Confirmó que la administración demócrata analiza con el Congreso un posible financiamiento de 40 millones de dólares para facilitar la venta.
En el encuentro virtual también estuvo el teniente coronel de la Fuerza Aérea Thomas Kanewske, quien se enfocó en las ventajas técnicas de los aviones que ofrece EE.UU.
El representante militar y la diplomática coincidieron en que ahora "la decisión depende de los argentinos". Pero le agregaron un pressing amable a la oferta. "No sé cuánto tiempo estarán disponibles los F16. Porque podrían ser usados en Ucrania. No queremos que la oportunidad desaparezca y por eso estamos trabajando con el gobierno argentino y danés para avanzar", explicó Resnick.
Así, a sólo dos meses para abandonar el poder, el gobierno de Alberto Fernández deshoja una margarita militar y geopolítica. Porque además de la de los F16, el Ministerio de Defensa argentino maneja otras dos opciones: una de China y otra de India. La ventaja de la alternativa estadounidense es que es la más económica: unos 450 millones de dólares, a cambio de 24 F-16. Pero China propone financiamiento para acceder a 15 aviones JF 17 nuevos y con tecnología 100% de ese país. ¿El precio? Unos 600 millones. La vía de la india es la más cara. Ofrece sus supersónicos Tejas a más de 900 millones. A pocos días de una gira por China, Alberto Fernández está a punto de optar por una de las tres alternativas.
Taiana se reunió con el embajador chino en medio de las negociaciones por la compra de aviones
En la charla con LPO y otros medios, la diplomática Resnick y el teniente coronel Kanewske, a su vez un experimentado piloto de F16, aseguraron que la oferta propia es mejor que la de China.
"Los F16 son una plataforma confiable y probada que permitirá entrenamientos y ejercicios regulares para incrementar la operatividad de la Argentina con sus vecinos y Estados Unidos", opinó la funcionaria.
Resnick a su vez le confirmó a este medio que la operación eludiría el veto permanente que, desde 1982, ejerce Gran Bretaña sobre la compra de armamento por parte de la Argentina. "No habría problemas, porque estos F16 no cuentan con piezas británicas", respondió ante una consulta de LPO.
Días atrás, el embajador estadounidense ante la Organización de los Estados Americanos subrayó la importancia que encierra la negociación de los 24 aviones caza. Respecto a la bilateral entre Argentina y EEUU, Francisco "Frank" Mora reflexionó: "Hay toda una serie de oportunidades. Creo que la venta de los aviones de combate es un tema importante. Tenemos varios temas de agenda común". Y un vocero del Comando Sur dio detalles ante este medio sobre la estrategia en marcha para contrarrestar "la maligna influencia" militar de China en Latinoamérica.