Negocios

La crisis AMLO-Larrea: en Palacio apuran una foto con Iberdrola para evitar que se hable de un "clima chavista"

Esperan presentar como un gesto de confianza hacia el Gobierno el aval del marcado a la compra de las plantas que operará CFE.

Durante el fin de semana en el gabinete se analizó a fondo el conflicto entre el Gobierno y Grupo México por unas vías férreas que la Marina ocupó el pasado viernes que son propiedad de Germán Larrea Mota y que se requieren para el Corredor Interoceánico, una obra estructural de este sexenio.

Andrés Manuel López Obrador no quiere que en la opinión pública crezca la postura de que su administración desalienta el clima de negocios y que tiene rasgos chavistas por la toma de las vías. Por eso, según pudo conocer LPO, se busca que en lo posible esta semana altos directivos de Iberdrola visiten Palacio Nacional y se anuncien los lineamientos financieros de la adquisición de las plantas de la empresa española. Desde la Secretaría de Hacienda operan la presencia de Ignacio Galán, titular de Iberdrola.

La postal que el presidente espera es la de un anuncio con presencia de bancos y Afores que, en un gesto de confianza a la 4T, acepten financiar los casi 6000 millones de dólares que se requieren. Según deslizan en Hacienda, hay tres Afores y cuatro bancos listos para incursionar en el negocio con el que CFE pretende abastecer de energía a toda la inversión que detona el nearshoring.

Para los bancos no hay grandes riesgos financieros. La inquietud viene de dos cuestiones: por un lado, que CFE incurra en algún riesgo de perfomance que complique la operación de las plantas y el abasto de energía y, por el otro, algún tipo de turbulencia en la sucesión presidencial del 2024.

Y es que los actores financieros son muy conscientes de que el negocio está cuestionado por casi todo el arco político: la oposición dice que las plantas de Iberdrola son chatarra mientras que Morena tampoco defiende con mucho entusiasmo una operación con una empresa que durante cuatro años fue denostada en la conferencia matutina.

Con esta táctica López Obrador espera invalidar los discursos que emanarán de su conflicto con Larrea desde mañana lunes. Pregunta ineludible: ¿Está en riesgo la compra de Banamex por parte de Larrea? En Palacio susurran que no, que ya existe acuerdo entre dos privados y que no habrá intervención porque además puede haber un principio de conflicto con Estados Unidos ya que se trata de una operación sujeta al regulador del país vecino.