Biden presiona a los republicanos y dice que el recorte de gastos agravaría la crisis del fentanilo
A horas del trascendente encuentro bipartidista con los líderes del Congreso, Joe Biden decidió sorprender y mostrar una carta que hasta hace poco no estaba en su repertorio de jugadas. Cuando faltan apenas tres semanas para que se defina el debate por el techo de la deuda, la Casa Blanca buscará reunir dos temas sin aparente conexión y presentar una nueva línea de acción para contrarrestar la ofensiva republicana.
Desde ahora, Biden rechazará el proyecto de ley que presentó McCarthy y advertirá que el recorte de gastos que plantea el Partido Republicano tendrá una consecuencia negativa en uno de los temas que más le importan, la crisis del fentanilo y el aumento del narcotráfico. La oportunidad es propicia, justo cuando el presidente se encuentra con los líderes republicanos del Senado y el Congreso, Mitchell McConnell y Kevin McCarthy.
Según publicó Político, el último memorando del equipo del presidente anticipa un cambio de estrategia por parte de la Casa Blanca y un nuevo argumento del Partido Demócrata para evitar el ajuste en el gasto proyectado por el gobierno. Los colaboradores de Biden afirman que la solución propuesta por el Partido Republicano de la Cámara empeoraría la crisis del fentanilo al recortar los fondos federales encargados de hacer cumplir la ley.
McCarthy presentó un proyecto de ley para el límite de la deuda y fuerza a Biden a negociar
Aunque no tiene el éxito asegurado, la jugada es astuta: confrontar las propuestas de los republicanos con sus propios objetivos, incluso los que definen como prioritarios.
El líder republicano en el Congreso, Kevin McCarthy.
De acuerdo al memorando publicado por Político, el portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, denuncia que la propuesta de límite de deuda recientemente aprobada por McCarthy para recortes de gastos obligaría a la Patrulla Fronteriza a despedir a más de 2,000 agentes en el momento de mayor tensión, cuando faltan horas para que finalice la vigencia del Título 42, la política que Donald Trump reinstauró en el inicio de la pandemia, hace más de tres años.
El informe de Bates sostiene que recortar gastos como pretenden los republicanos tendrá un efecto muy peligroso en un tema de los más sensibles y "sobrealimentará la crisis del fentanilo". La poda en el Presupuesto obligaría a los demócratas a desplazar de sus puestos a miles de agentes de la Agencia de Control de Drogas, el FBI y la Patrulla Fronteriza.
Además del efecto de los recortes propuestos por el proyecto de ley republicano en esas tres áreas estratégicas, el memorando de Bates también afirma que los recortes en la cobertura de atención médica de la propuesta republicana harían más difícil obtener tratamiento para adicción.
"Los republicanos están aprovechando al fentanilo para avanzar en su agenda política"
"Ya es hora de que la Conferencia Republicana de la Cámara recuerde los votos bipartidistas que tomaron para evitar el incumplimiento sin condiciones en toda la Administración Trump y trabajar con el presidente Biden para aumentar los recursos de aplicación de la ley y devastar a los cárteles de la droga que traen fentanilo mortal a las comunidades estadounidenses", afirma el texto firmado por el secretario de prensa de la Casa Blanca.
La contraofensiva demócrata para impedir que los republicanos condicionen la política presupuestaria de Biden indica que el equipo del presidente persistirá en la necesidad de aumento del techo de la deuda y agitará todos los fantasmas para impedir mayores recortes en el gasto federal. Tal como viene contando LPO, los republicanos han convertido en eje de sus criticas al presidente el crecimiento del narcotrafico, el fentanilo y la presencia de los cárteles en territorio estadounidense. Ahora Biden, busca responsabilizar a sus rivales de lo mismo que denuncian a tiempo completo.
Los especialistas alertan que la pulseada será prolongada y los republicanos tampoco se darán por vencidos con facilidad y harán sentir el peso creciente que tienen en los debates públicos, pese a la derrota en las legislativas de noviembre. Los analistas coinciden en que la influencia de los republicanos ha aumentado de manera notable desde la última vez que McCarthy y Biden se reunieron, hace 96 días. Las dificultades para reemplazar el fuerte liderazgo de Nancy Pelosi en la Cámara de Representantes, la ruptura de la senadora Kyrsten Sinema con el Partido Demócrata y la ausencia prolongada de la californiana Dianne Feinstein debilitan a Biden y generan un gran signo de interrogación de cara al debate por el techo de la deuda.